Según un estudio de FIEL, más de la mitad del crecimiento económico de estos últimos 8 años se explica por las excepcionales condiciones internacionales, incluidos los precios récord de los productos que exporta el país.
De lo que queda del crecimiento, la construcción es un factor muy importante. La construcción genera actividad económica pero no contribuye a la productividad general de la economía.
El aumento de la productividad en esta década ha sido prácticamente nulo.
El país ha consumido el stock de capital, la infraestructura de ha deteriorado considerablemente desde 2001.
Pregunta un servidor, ¿qué le va a quedar a Argentina después de una casi una década de las condiciones internacionales más favorables en 100 años, más allá de una hipoteca que va a costar sangre levantar?
Lo miren como lo miren, lo de estos años ha sido criminal.
Schoklender no opina lo mismo.
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