Leía que el gas de pizarra emite diez veces menos gases de efecto invernadero que la biomasa o el etanol, con el que tanto rompen las pelotas los ambientalistas.
Y, sin embargo, esta misma gente se opone absolutamente a su explotación. Acá en Québec saltaron como leche hervida ante un proyecto en el norte de la provincia.
Cada vez me queda más claro que el objetivo de los fundamentalistas ambientales no es ni salvar al planeta, ni la defensa del medio ambiente, ni nada por el estilo sino decirles a los demás cómo tienen que vivir sus vidas.
A las soluciones a los problemas hay que llegar mediante la planificación central, un grupo de iluminados preclaros que le cantan la justa a la negrada ignorante, nunca a través del intercambio voluntario de bienes y servicios.
Esta gente hablando de gases de efecto invernadero y el vapor de agua es el mayor gas de efecto invernadero. Pero quién va a atacar al vapor de agua, ya sería el colmo, por eso se encargan del CO2 pero es el menos abundante y potente. Es todo un delirio.
ReplyDeleteHay que prohibir el vapor de agua, Rothbard.
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