No puede ser, debe haber un error. Les soy honesto, yo, que soy un roedor, no tiraría mi reputación profesional a la basura por cien mil mangos.
Al destacado economista internacional, ¿le habrán pagado el equivalente en pesos al tipo de cambio oficial?
(Gracias, Fiura)
No quiero pensar entonces en lo que cobraría Chomsky para que la presi se saque una foto con él.
ReplyDeleteDe nada, Master!
ReplyDeleteLo de la reputación me recordó un cuentito...
Dicen que cuando Cristilinga pidió audiencia con el Papa Benedicto XVI, el Secretario del Santo Padre fué a informarle.
Y él se mostró intrigado por la visita de la fulana:
- Dígame, es buena esta señora?
- Buenísima, Su Santidad!
- Y es fina?
- Finísima, Su Santidad.
- Y es rica?
- Riquísima, Su Santidad.
- Y la reputación?
- Reputísima, Su Santidad!
ajajaja buenísimo.
ReplyDeleteDetrás de la sonrisa de Stiglitz ayer: "con cuántos gatos me hago la fiesta- fiesta tonight?"