Jan 16, 2013

El otro fin de semana



Nos escapamos a Mar del Plata, más que nada para recordar por qué nos vamos de vacaciones al extranjero cuando podemos, y a visitar a un matrimonio amigo. La ciudad estaba vacía. Las carpas ($150 por día de alquiler) estaban todas vacías. En la zona libre de la playa había poca gente. Poco tránsito, la peatonal como si fuera un sábado de invierno. Los locales de video juegos para niños vacíos. Estamos hablando de un sábado de enero. En la época del Carlo I de Peronia recuerdo que era imposible andar por Mar del Plata y eso que estábamos mal y la gente se iba a Brasil y el Caribe porque era muy barato.

Por vagancia fuimos a comer a restaurante medio pelo que nos quedaba cerca, entrada de rabas, un plato de ravioles bolgnesa, unas milanesas, y gaseosas de bebida: $119, unos 18 dólares, para dos personas. Me pareció muy barato.

Los departamentos estaban algo así como desde $2500 monoambiente, $3000 dos ambientes, y $3500 tres ambientes por quince días.

Los precios no me parecen caros o delirantes, pero quizá es un tema de sensación térmica, el ingreso promedio de las familias está en $5000. Para mi esta gente destruyó a "la clase media" con la inflación, ya no se pueden ir de vacaciones.

7 comments:

  1. Hoy me comentaban lo mismo de las sierras de Córdoba, la gente llora porque hay muy pocos turistas.

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  2. Si ésta es la situación ahora, cuando todavía pueden mantener la ilusión del consumo, no sé qué va a pasar cuando se termine la plata.

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  3. Y la segunda quincena la cosa pinta pa´pior...

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  4. Si es por mí que los comerciantes se la aguanten, porque cuando es verano hacen su agosto cobrando fortunas por cada producto o servicio.

    Eso sin contar la contaminación del mar en la costa de Mar del Plata a causa de desechos cloacales. Ni hablemos de la suciedad de las playas.

    Y si uno quiere vacacionar con mar frío, para eso está Viña del Mar, aunque con dos diferencias, entre otras: la oferta de productos y servicios es abundante, lo mismo ocurre con la limpieza.

    Andrés

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  5. Desde que conocì las playas Brasileras,
    Argentina llega hasta Quilmes.
    Amèn(con perdòn de la palabra),no veraneo ni loco bajo este Còdigo Penal,Tributario,Comercial. Y sobre todo MONETARIO.

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  6. Modestamente, no creo que la cuestiòn sea dònde se veranea ni las avivadas de los comerciantes, yo creo que lo que hay que ver es el cariz que estàn tomando todas las cosas en el paìs, cada vez menos vivible (para gente decente digo).
    Emma Peel

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  7. Los números no cierran.
    Conclusión pongamos quinta y sigamos igual.

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