Aprietes

Qué increíble que otra vez vuelvan a pasar estas cosas en la Argentina. Somos patoteros por naturaleza. Según Jorge Asís se acerca el final de fiesta:

Para simplificar, sin figuras ni eufemismos, Kirchner viene en falsa escuadra.
Habrá que sostenerlo voluntariamente para que llegue, con oxígeno artificial, al 2007.
Cuando las pautas publicitarias, el mayor atributo de su contundencia política, sean económicamente insuficientes para calmar la insaciabilidad del empresariado mediático, habrá terminado el viaje.
Y utilizarán entonces, los medios, el arsenal informativo que acumulan.
Las producciones completas sobre el bello Puerto San Julián, con especial delectación en las actuaciones en Lo de Lara.
O en los escabrosos detalles de los secretos que se arrastran, amorosamente, desde Río Turbio.
Será el turno entonces de fotografías invalorables. Como aquella que ilustra el fatigoso traslado de la enorme caja fuerte, que pertenecía a determinado banco, hacia la residencia personal de Calafate.
Fotografías de juristas físicamente prominentes. Minuciosas reconstrucciones de coleccionables vidas y obras, por ejemplo del Rudy, de Lázaro, de Jaime, los Gotti y los Guatti, y con desopilantes historietas de Alicita y del Bombón.