Un presidente acusa públicamente a personajes públicos de complotar para desestabilizarlo, en plena campaña electoral, sin sustentar sus dichos con el menor indicio de prueba. No, no es Alfonsín en sus primeros años. Se trata de Salvador Kirchner en la Argentina del 2005.
Como salido de un libro de texto, aplicamos las mismas políticas y tenemos los mismos resultados. Me pregunto cuánto falta para que metan en la cárcel a algunos periodistas que no piensan como el presidente.
IUJU!! Vuelven los sacos con hombreras!!!!
ReplyDeletejajajajaja!!!! mientras no vuelvan los flequillos tubulares y las polainas fucsias!!! jajajajajaja
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