Una de las grandes ventajas de vivir en el país de la fantasía, también conocido como "Argentina post golpe de 2001", es haber vuelvo al consenso generalizado de que nuestras acciones no tienen consecuencias. El famoso "vos metele que no pasa nada". Devaluamos 300% la moneda y no pasa nada. Destruimos todos los contratos de la economía y no pasa nada. Destruimos la moneda y no pasa nada. Actuamos como bola sin manija en nuestras relaciones internacionales y no pasa nada.
Bueno, parece que si pasa. Aparentemente, mucho después de que termine toda la festichola, y que el basurero se haya llevado las cajas y cajas de botellas de champagne vacías y se hayan secado el semen de las sábanas de la Quinta de Olivos, los simpáticos argentinos tendremos que seguir pagando la cuenta por décadas. Me pregunto si Kirchner, su señora esposa, Duhalde, su padre político, Lasaña y toda esta manga de delincuentes tienen aunque sea una vaga idea de lo que se viene.
Comparto tu punto de vista, con una sola observación: una multiplicación del precio del dólar por tres no es una devaluación del 300%, sino del 200%.
ReplyDelete