Señores, no hay caso. Somos todos progresistas. Podemos asumir sin temor a equivocarnos que el progresismo es el valor por defecto en todo el mundo, lo que en mi época de la universidad llamábamos “psicobolchismo”. Cuando conocemos a una persona, lo más probable es que sea progresista. Por lo menos en el discurso.
Hoy leo en el diario que la Universidad de Sherbrooke, una de las más reconocidas en la provincia, otorgó una medalla de distinción nada más ni nada menos que a Paul Kagame, el presidente de Ruanda. Por supuesto, horror e indignación entre la comunidad congolesa en esta zona por su rol en la guerra con ese país.
Perdón, me corrigen si estoy diciendo cualquier cosa, pero ¿no se acusa a este señor de la matanza de casi un millón de personas en el Congo y de genocidio en su propio país? Me parece que hace gala a su apellido.
Me pregunto si esta misma gente siquiera recibiría a Bush en la universidad, ni hablemos de entregarle una medalla.
Acá en su momento el ex jefe de gobierno Anibal Ibarra nombró visitante ilustre a Fidel Castro, quien habló ante una multitud de progres extasiados en las escalinatas de la facultad de Derecho.
ReplyDeleteEn ese momento sólo una pequeña agrupación estudiantil (que después fue cooptada por el gobierno) se opuso a la visita del tirano caribeño, y obviamente fue apaleada por las fuerzas de choque de la izquierda y los servicios de inteligencia cubanos.
En definitiva, Canadá se parece más a la Argentina de lo que uno piensa...