Viejazo tecnológico

Me gusta sacar fotos. No soy un buen fotógrafo, pero me defiendo en circunstancias normales. Como con esto de opinar, no saco fotos porque sepa sino porque me gusta.

Parece mentira, pero creo que mi cámara de película Olympus IS3, que compré en 1995, llegó al final de su ciclo. No porque no funcione correctamente, sino porque aparentemente las cámaras de película ya no van más. Están out. Es increíble pero casi no se consiguen rollos. La sección de películas en Walmart pasó de ocupar una góndola de unos 5 metros de ancho a unos tristes 50 centímetros. El capitalismo salvaje.

Me temo que para evitar la obsolescencia tecnológica no me quede más remedio que comprar una cámara digital próximamente en esta sala. El Gran Problema Gran es que las que me gustan todavía salen un egg, por lo menos una equivalente a mi Olympus del alma actual. Todo un tema.

Como la Opinadora me mata si gasto mil mangos en una Canon EOS Rebel, estuve pensado en una opción intermedia, una “interim camera” hasta que las buenas bajen de precio o gane el Loto.

Una de las opciones que me entusiasma es la Canon Powershot S2 IS, de 5MP y zoom óptico de 12x. Una de las mejores relaciones precio calidad que encontré. Pero como sé que trato con entendidos, estoy abierto a sugerencias.

Esto de ser burgués no es soplar y hacer botella, no se crean.