Escuchaba en la radio hoy este informe sobre los terroristas que planearon el atentado en Londres el pasado fin de semana. Me parece que la gente de NPR no ha visto la película de Miguelito Moore.
Me quedo con este fragmento:
It appears that all of the suspects in Britain's investigation into attempted attacks there worked for the country's National Health Service.
Most of the suspects came from outside Britain, with origins in the Middle East and South Asia. They were hired as part of government efforts to fill positions in the health service, which suffers a shortage of trained medical personnel. Twenty-two thousand foreign doctors have arrived in Britain in the last three years alone. About nine hundred have come from Iraq. They helped fill a desperate need in the UK for healthcare professionals. Many British doctors, nurses and technicians moved to the US or Australia where the pay is better.
Estados Unidos atrae pacientes de todos los rincones del planeta que vienen en busca de los tratamientos más avanzados; sus universidades atraen a los mejores estudiantes de medicina, y sus hospitales a los mejores profesionales, muchos de ellos que escapan despavoridos del estado bienestar, como en el caso arriba descripto.
Seguro, el sistema de salud americano tiene serios problemas y necesita una buena reestructuración. Pero la idea del Orson Welles del siglo XXI, cubanizar la mejor medicina del mundo (igualar para abajo), es seguro el camino equivocado.
El socialismo fracasa siempre, no importa donde se lo aplique. Me imagino que a esta altura del partido por lo menos ese pequeño datito de la realidad ya nos quedó claro.
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