Según Jorge Castro, las FARC tienen los días contados.
Todo el mundo sabe que la principal fuente de financiamiento de estos asesinos es la droga. Digo, de pronto, me parece, ¿por qué no legalizar los cultivos y privarlos de ella?:
El problema de las FARC no es la falta de recursos ni la carencia de armas; es la guerrilla con el más alto nivel de financiamiento y el equipamiento más moderno de toda la historia de América latina.
Su problema es político; su apoyo popular en Colombia es mínimo y tiende a decaer. Sólo el 4 o el 5% de la opinión colombiana respalda a la organización guerrillera; y aumentan en sus filas, no sólo las bajas, sino sobre todo las deserciones. Eran 16.900 combatientes en el año 2000 y ahora son 8.900. Sufre entre 1.500 y 2.000 bajas por año. En los últimos 12 meses, las FARC han perdido dos comandantes regionales y otro ha sido capturado. El viernes cayó el segundo integrante del secretariado en una semana, Iván Ríos. En enero y febrero perecieron 247 combatientes y 226 fueron capturados, mientras desertaron 360 en el mismo período.
Hola Louis:
ReplyDeleteCoincide con un articulo de " Enfoques " de La Nacion: Alfredo Rangel (politologo colombiano).
De todos modos creo que el resultado final de este episodio no salio a la luz:la asociacion ilicita entre las FARC con Correa,Chavez y el violador de nicaragua Ortega.
Por algo se fueron al mazo rapidito, antes que Uribe siguiera sacando papeles.
Argentina, bien gracias.Creo que tenemos menos peso reginal que Uruguay - esto es generoso con los K -
Saludos
ramon cassino
Ramón, creo que se equivocan o pecan de wishful thinking los que creen que el asunto ha terminado. Esto va para largo y en cualquier momento vuelve a la tapa de los diarios. Creo que Uribe guarda esa información para la próxima.
ReplyDeleteEs posible, Luis, como que los debe de haber amenazado: déjense de joder, por última vez, o la próxima va a ser mayor.
ReplyDeletePareciese ser, esperemos, que las horas de las FARC están contadas.
Quién lo hubiera dicho hace sólo diez años cuando Colombia parecía perdida sin remedio.