Carlos Rodríguez Braun reafirma aquello de que los progres están siempre mucho más preocupados en terminar con la riqueza que en hacerlo con la pobreza:
El odio al consumismo es típico de la elite ilustrada, que lo que en el fondo rechaza es el enriquecimiento del pueblo. Cuando lo logra, estos elitistas lamentan el consumismo, cuando en realidad lo que lamentan es el consumo, es decir, el bienestar. Nuestras sociedades no son consumistas: son ricas, que no es lo mismo. Si uno quiere muy poco consumismo, basta con darse una vuelta por los países comunistas, los mayores enemigos del consumo y de la riqueza que hay en el planeta.
basta escuchar a alguien que haya vivido en un regimen de europa oriental antes del 89.
ReplyDeletepatetico