Se enrarece aún más el ambiente en la Argentina kirchnerista.
Batalla campal entre distintas facciones durante la asunción del Néstor a la jefatura del PJ.
Y, para colmo, como durante el gobierno de Alfonsín, vuelve el golpismo. Esta vez en su versión “proto”.
Y bueno.
ReplyDeleteSi apoyar al campo en esta crisis que fue creada por una medida confiscatoria del estado es ser golpista...
Si levantar la voz para oponerse a este mamarracho de gobierno es de golpista...
Si el considerar que las minorías deben tener voz en una democracia es de golpistas...
Entonces con orgullo me declaro: soy golpista.