Pueblo de Mierda

Hay que reconocer una cosa. La presidentA, o su asesores, es inteligente. Muy inteligente. Sabe a qué pueblo se dirige. Conoce a la gilada al dedillo. Y esta jugada de construir hospitales públicos con los fondos confiscados a los productores es una muestra cabal de ello. Cómo será que los propios cabecillas del campo parecieron quedar sin respuesta hoy. La respuesta en un país normal no se haría esperar: "cómo más hospitales públicos, cuando los que tenemos no tienen ni curitas?", "qué tal controlar la inflación que está sumiendo al país a un nuevo proceso de empobrecimiento en masa?", "porqué nos promete hospitales públicos ahora?.. no hacían falta esos hospitales hace dos meses cuando hablaba de un tren bala?" Pero estamos hablando de Argentina. Y estamos hablando del pueblo argentuso. Ese que se cree el más avanzado y sofisticado del planeta a pesar de chocar una y otra vez con la muralla del fracaso.

Hablemos de pueblos. Les cuento de uno, que fundó y construyó un país en el medio del desierto, en tierras que no valen ni medio sorete. Ese pueblo, formado por personas de diversas razas, diversas lenguas, diversas culturas, que llegaron a arremangarse la camisa para laburar por un fin común, hace poco celebró su cumpleaños número 60 frente a la atónita mirada de un mundo hostil que no puede entender cómo en seis décadas se erigió, desde la lacra que es el medio oriente, en una potencia mundial. Felicidades Israel.

Hablemos de otro pueblo. Uno que en ese año '48 en el que se fundó Israel estaba en el comienzo de un declive que hasta hoy parece no tener fin. A diferencia de Israel, este país está formado básicamente de dos razas, una cultura, un idioma. Y está asentado en uno de los puntos más fértiles del planeta tierra. A diferencia de Israel, este es un país que castiga a los laburantes para premiar a los vagos que, o forman parte, o viven del sistema. Este es un país donde un pueblo grita que se vayan todos, hasta que se da cuenta que cuando se van todos, se terminan los bolsones y los planes trabajar.

Cómo se dirige un líder a un pueblo como el israelí? Con mensajes de unión, haciendo sacrificios antes de tener la cara de pedírselos a su gente, con optimismo, con honestidad, con bolas. Digno mensaje a un Digno pueblo.

Cómo se dirige un líder a un pueblo como el argentino? Como Mugabe se dirige a su pueblo en Zimbabwe. Después de haber exprimido todo lo que podía de los laburadores en ese país con medidas geniales como el aumento del gasto público, la emisión de moneda sin respaldo, controles de precios y salarios en todas las actividades, control absoluto del comercio exterior y otras joyas de principios de la economía que los argentinos conocemos de memoria. Después que la irresponsabilidad y la corrupción no dejaron otra opción, el Gran Roberto se va al palco y le dice a su pueblo que la culpa de la malaria yace en los terratenientes. Acto seguido comienza, ante el júbilo del pueblo, una expropiación masiva que marca el comienzo de la crisis absoluta en ese país.

Cristina conoce a su público, más africano que occidental. No es coraje, optimismo y unidad lo que satisface al argento. Revanchismo, división, delirio... ese es el mensaje que pedimos: hay que cagar a los que producen.

Y eso nos dan. Nos gusta. Los Kirchner no son los responsables de la catástrofe de país que tenemos. Somos nosotros. Es nuestro pueblo de mierda el único responsable de todo esto. Por eso... así nos va.