Una noticia que me llama la atención.
En cinco años desaparecieron 47.000 teléfonos públicos en Argentina.
Seguramente se trata de la contracara de la explosión en la venta de celulares en ese mismo periodo, el servicio que menos dependía de inversiones para seguir creciendo (por lo menos en un principio).
Qué lejos quedaron las épocas en que la madurez de una red telefónica se medía por la cantidad de teléfonos públicos instalados.
El año pasado cayó a Rosario un irlandés (jubilado) que había trabajado en el servicio de teléfonos públicos de New York.
ReplyDeleteEl tipo contaba que había un edificio completo en Hell's Kitchen donde funcionaba la división. No sé cuántos técnicos, operarios, choferes, móviles, depósitos de materiales, talleres, etc.
Hacía poco había estado de nuevo, y fue a visitar el lugar.
Sólo quedaba una oficinita, una camioneta, y el sereno.
Mira vos, parece que la cosa es universal.
ReplyDeleteBlogbisito llegó a Londres con la idea de sacarse una foto con una de las tradicionales cabinas rojas.
ReplyDeleteHubo que buscarla con lupa.
A cambio, parece que los móviles terminaron con la provervial parquedad británica. Ves gente dándole al celu sin parar. Se ve que la tarifa plana es un éxito.