Me llegó una presentación PowerPoint sobre el horror de la situación política y económica de Guinea Ecuatorial – una antigua colonia africana de Buenos Aires.
Por supuesto, la culpa la tienen las “potencias extranjeras” que sostienen al sátrapa local, Teodoro Obiang Nguema Mbasogo, a cambio de que les permita robarse Sus Riquezas. Cuando el autor de la presentación habla de “potencias extranjeras”, de más está aclarar que se refiere a EEUU. Muy al pasar, a China.
Guinea Ecuatorial era un paraíso terrenal, donde la gente vivía en paz, armonía, se profesaban amor mutuo y no existía la caspa ni el mal aliento hasta que llegó EEUU, como de costumbre, a robarse Sus Riquezas. De ese entonces, Guinea Ecuatorial es pobre.
¿La solución?
El autor no lo dice directamente, pero deja entrever que no estaría nada mal terminar de nacionalizar los pocos sectores que siguen en manos privadas, confiscar las inversiones extranjeras, cerrar la economía y “vivir con lo nuestro”.
De más está decir que les espera un futuro brillante.
Los que sí hacen pingües negocios con Guinea Ecuatorial son los españoles. Repsol y Telefónica y varias constructoras rienen inversiones allí. Lo mejor es que ZP lo recibió a Obiang pocos meses antes que éste viajara a la Argentina, pero no le dijo nada sobre los derechos humanos debido, no sólo a las inversiones mencionadas, sino a que España le vende armas a Guinea Ecuatorial.
ReplyDeleteEs la conocida doble moral del progresismo español.
evo dijo que nacionalizando algunas empresas los bolivianos iban a tener un nivel de vida como el de suiza.
ReplyDeleteJAJAJAJAJAJAJAJAJA
no se que es peor ser muy ignorante o ser muy mentiroso.
se tiran al precipicio creyendo en que un cuento de hadas los salvará. Estos sociatas no tienen ni la más mínima noción de la realidad.
No te rías, anónimo, Evo y sus amigos tendrán el nivel de vida de los suizos. El resto de los bolivianos tendrá el nivel de vida de los sucios.
ReplyDeletecual sera la carne de la UBA? osobuco?
ReplyDeleteLos europeos son los peores hipócritas. Son lo que ellos acusan a EE.UU. de ser.
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