Pongamos una cuota de magnanimidad y dejemos de lado su presidencia. Haber sido uno de los principales promotores del primer golpe civil de la historia del país, contra un presidente de su propio partido, es sencillamente imperdonable.
Mar 31, 2009
Que Dios lo perdone
Lamento lo de Alfonsín, no le deseo la muerte a nadie. Pero honestamente creo que lo poco positivo que representó alguna vez para el país fue absolutamente eclipsado por lo nefasto de su influencia en la política nacional.
Pongamos una cuota de magnanimidad y dejemos de lado su presidencia. Haber sido uno de los principales promotores del primer golpe civil de la historia del país, contra un presidente de su propio partido, es sencillamente imperdonable.
Pongamos una cuota de magnanimidad y dejemos de lado su presidencia. Haber sido uno de los principales promotores del primer golpe civil de la historia del país, contra un presidente de su propio partido, es sencillamente imperdonable.
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mejor explicado Imposible.
ReplyDeleteLa historia lo juzgarà
No supo, no pudo, no quiso
ReplyDeleteEl problema es que de inmediato le van a poner su nombre a alguna calle o avenida de Capital y/o conurbano.
ReplyDelete¿Por qué lo pintan como un héroe? La democracia iba a volver igual, con él o con cualquier otro. Además, mejor ni pensar en las consecuencias. Tengo 35 años y, sin esta pesadilla que estamos viviendo, el gobierno de Alfonsín quedó grabado en mi infantil memoria: comprar a la mañana lo más que se pudiera porque a la tarde iba a ser más caro o no iba a haber más. Un horror!
ReplyDeleteAdemás, como todo radical: seudoprogre e inútil.
Lo peor de todo son los diarios argentos.
ReplyDeleteTodavía el tipo no se murió y ya lo están sacrificando.
El mejor símbolo de la nueva democracia argentina, con un fracaso tras otro y sosteniendo contra viento y marea todos los tótems del populismo.
ReplyDeleteY lo que ha salido de bueno, el fin de la violencia política, no tiene nada que ver con él sino con el hastío del pueblo.
Todo lo que quieran, pero comparado con lo que había en el menú electoral de hace 26 años, RA era Vaclav Havel. O se olvidaron de Luder, Bittel y Herminio ?
ReplyDeleteNatalia, yo viví lo que vos decís comprando los pañales para mi primer hijo... un precio en la góndola y otro mayor en la caja... Pero aún así discrepo contigo. Si ganaba el peronismo en el 83.. hoy estaríamos remando para algún día ser como Zimbabwe.
Yo lo voté para presidente. Por curiosidad, lectores, a quienes votaron ustedes en esa ocasión ?
Ojo, esto no es una defensa. Su incompetencia y obstinación fueron épicas... y el elenco radical de los 80s, mi dios....
Que la tierra le sea leve... Ya que despues de todo, no estamos hablando de un Fidel.
Comparto, Mike. Por eso dije que dejo de lado su gestión como presidente. Se hace lo que se puede.
ReplyDeleteMi reproche va al Alfonsín que vino después, la topadora institucional.
Hago mios los comentarios de Luis (y de Mike... a quien le aclaro que en esas votaciones yo no estaba en el padron pues era muy pequeña)
ReplyDeleteA nadie, Mike, yo nací un año después.
ReplyDeleteSoy pendejo.
Claro, ahora todos dicen "yo no lo voté, era muy chiquito".
ReplyDeleteLuis, se me pasó lo que pusiste de dejar de lado su presidencia.... Para aclarar entonces, no sé si Alfonso está entre los peores presidentes... lo que estoy seguro es de que estará entre los peores EX-presidentes. Un verdadero Carter argento.
No sé Dios, pero la historia va a ser dura con él. No sobredimensionemos, Alfonso no es EL responsable de nuestros males post-dictadura. Nuestro país había decidido suicidarse un largo tiempo antes de su mandato. El sistema estaba ya podrido.
ReplyDeletePero esto no lo exime tampoco: la historia no va a ser generosa ni con él ni con los que vinieron después porque, en lugar de dar la vuelta, se encargó de agarrar la linterna al grito de "sigamos hacia el precipicio, muchachos."
Nací en el 84, con Reagan a la cabeza (parafraseando a un pobre músico argento).
ReplyDeleteAsí que yo no lo pude haber votado.
Coloco la excusa de la edad. Recuerdo los festejos en mi barrio de clase media de Buenos Aires porque había perdido el peronismo. Mi padre estaba desencantado de todas formas. Sabía muy bien quienes eran los radicales, era lo mismo quien ganase.
ReplyDeleteMike, ¿realmente hubiese sido muy diferente con Luder de presidente?
Y otra pregunta: ¿Qué aportó Alfonsín para detener la veloz carrera Argentina hacia Zimbabwe?
Mi respuesta es nada (¿el ahorro forzoso?), no sé si alguien tendrá otra.
Yo vote por Alfonso. Fui a Ferro el dia que la CGT hizo el paro, a la 9 de Julio, y a un monton mas de actos pedorros. Eramos tan jovenes!
ReplyDeleteYo también voté a Alfonsín en el ?83. Viví la hiperinflación, etc. Pero...la verdad, a pesar de todo me duele lo que le pasa, no se si es que siento que nada fue ni será peor a lo que hay ahora.
ReplyDeleteAcaba de fallecer Alfonsín. Realmente lo lamento. "La casa está en orden. Felices Pascuas"
ReplyDeleteCuanta ignorancia en tan pocos posts! La verdad es que demuestran no tener los más mínimos conocimientos de economía o de ciencia política... Alfonsín fue un político extraordinario con sus aciertos y errores, pero considero que no se puede poner en duda su vocación democrática.
ReplyDeleteAnónimo, ¿su vocación democrática para arreglar con Duhalde de voltear a De la Rúa?
ReplyDeleteLa famosa vocación democrática de estar en favor de la democracia mientras me gusten quienes ganen.
¿La vocación democrática de mandar hacer denuncias de bombas a los colegios para desatar el miedo?
Y mejor ni nos metamos con su vocación constitucional.
¡Lindo prócer!