Por razones de trabajo recién llego a casa (son las 01:55hs), con dos situaciones totalmente distintas. La muerte ya preanunciada de un gran líder de nuestra vapuleada democracia, Don Raúl Ricardo Alfonsín y la vida de un cantante muy popular y de antaño como Raúl Lavie. Me encontré en el lapso de un par de horas con situaciones totalmente diferentes. La primera con un sabor amargo por la pérdida de un gran presidente, un gran estadista, un gran político. La segunda en Villa Ortúzar en un bar cantando su amplio repertorio tanguero.
Raúl Alfonsín, que supo sobreponerse a situaciones difíciles luego del regreso de la democracia, supo soportar trece paros de los dirigentes gremiales que no supieron valorar el regreso de la tan esperada democracia, intentos de golpes militares, la desestabilizadora situación económica de la oposición perversa del peronismo, inculcando la confrontación en el Congreso sin golpes bajos, con lealtad. Se fue un gran presidente con todas las letras, una imagen de líder, con un carisma fuerte, con palabras seguras.
Pero ahora aparecen las miserias de los dirigentes que se acercan a expresar el dolor por tan gran pérdida, los que le embarraron la cancha, los que apuraron su salida del gobierno porqué ya habían negociado con el que sería uno de los gobiernos mas nefastos para la historia argentina, con la venta y el desguace de la nación. Ahora ya es tarde para recordarlo, porque los que aparecen ahora y hablan fueron los mismos que le impidieron terminar su mandato. En fin, somos malos bichos. Mucha gente, los vecinos de su domicilio, depositando flores y prendiendo velas, dan un último adiós en lo que fuera su casa, antes, durante y después de ser presidente. ¿Raro no? ¿Por qué no se fue a un country privado, por qué no tuvo los beneficios de la abundancia? ¿Por qué primero era argentino, después radical, finalmente presidente.
En fin, un humilde adiós para quién en los momentos más duros del país cuando regresamos a la democracia puso el pecho y supo sobreponerse a todo.
Adios Don Ricardo Alfonsín.
El Gran Alberto
Sí claro,
ReplyDelete-La hiperinflación
-El estado de sitio
-La agresión y apresamiento a periodistas
-El plan Megatel
-Los pollos de Mazzorin
-La Coordinadora
-Pacto de Olivos
-Derrocamiento de De la Rúa
-Semana Santa
-Pésima solución para el problema militar
-No haber puesto en caja a los sindicatos peronistas
...
y paro para no aburrir.
Claro, que al lado de la mafia enquistada en el poder que hoy sufre como nunca nuestro país, Don Raúl Ricardo era un demócrata y un estadista (o estatista?)
Ah, yo lo voté. A quién sino, ¿a Herminio?
Bue, Néstor me ganó, todo muy lindo pero mi viejo en esa época no cobraba el sueldo, el dinero se derretía en las manos y no creo Ubaldini manejara el Banco Central. El Alfonso fue un populista más. No creo que haya darle un premio por no robar, es lo mínimo que deberíamos esperar de un presidente. Pero Nosiglia, Mazorin, Vico... vamos. Y sobre lo del remate del país con Menem, cada uno seguro sabe de un conocido que trabajaba en una de las joyas vendidas. Yo conozco dos casos, uno era empleado de Entel, soldado razo, nada de gerente, con Entel compró 5 propiedades y 2 taxis, agarró el retiro voluntario y no volvió a trabajar nunca más.
ReplyDeleteEl otro caso de Entel es un director, hoy es un millonario que se dedica a administrar su (nuestro) dinero. En un momento fue gerente de Movicom, pero ya estaba hecho.
Ni hablar, prefiero no entrar en el tema porque me enveneno.
ReplyDeletePerdón, lo de Vicco fue con Menem.
ReplyDeletePero si rescamos el tarro... encontramos un Bulgheroni. Sobre la panamericana hay una empresa que alquila m´´aquinas viales, con el nombre de una Bahía de la provincia de Bs As. Ese viejo era un changarín, tenía un autoelevador. En diez años se convirtió en un imperio, se comenta que es testaferro de un tal Dante Caputto. Recordemos que en los 80s de Alfonso todos los canales de TV eran del estado (menos el 9), que había listas negras, etc... quizás no se robó como con los Kirchner, pero...
ReplyDeletey lo que hizo con el Poder Judicial no tiene nombre... hasta vino Isabelita a decirle que si no paraba la mano le tiraba los peronachos al cogote... mi padre era juez nombrado en epocas constitucionales y Alfonsin a cuento de que los jueces debian ser confirmados por el Congreso aprovecho para hacer "purga" ideologica... fue vergonzozo... todavia recuerdo a un amigo de mi viejo a quien le dijeron (yo lo oi a pesar de ser una jovenzuela) que no le daban el acuerdo por ser del Opus Dei.. el tipo no lo era ni lo pensaba ser... ese fue el argumento para borrarlo del Poder Judicial.. y a mi viejo? "no te nombramos camarista porque no sos politicamente manejable" (palabras textuales del llamado telefonico)
ReplyDeleteNo, no creo que Alfonsin se merezca las cosas lindisimas que le atribuye Mr. Great Albert...
POr fin un post como la gente en este blog
ReplyDeleteFelicitaciones Gran Alberto
Me parece que es último adios con tanto sentimiento a un ex-pesidente. Cuando se muera el pingüino, será un carnaval carioca. No niego que Alfonsín haya tenido errores, pero apoyo 100% al G A en lo que publica (y no es por el lazo que nos une) . Por supuesto que mi familia pasó por feos momentos económicos durante la hiperinflación pero nada se compara con al persecusión y la injusticia que sufrieron durante la época del Perón y su "mujercita" , la representada por Madonna, a la cual siento asco de solo nombrar. Cuando se murió la antes mencionada, que seguro está viendo crecer los rabanitos desde abajo, mucha gente iba obligada porque perdía su trabajo, la gente que hace cola para despedirse de Alfonsín va por las suyas. En fin, son puntos de vista.
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