De la sección “reescribiendo la historia para hacerla más políticamente correcta”, Federico, el hijo de Adolfo Sturzenegger, nos cuenta que en realidad Alfonsín no sólo fue un estadista de nivel internacional, el padre de la democracia moderna argentina, sino que su gestión económica, lejos de ser fracaso descomunal, fue un éxito rotundo.
¿Será una nota atrasada por el “día de los inocentes” anglosajón?
Cómo no nos dimos cuenta que en los "gloriosos" 80 estábamos económicamente tan bien.
ReplyDeleteNo hay caso, cuando te explican el problema con las matemáticas de la Dignidad, uno no tiene más remedio que convencerse.
¿El artículo es en serio?
ReplyDeleteEs tan serio como lo fabuloso que funciona el país según las cifras del IndeK.
ReplyDeleteLe salió ladeao el hijo a Sturgenetzer.