Qué irónica la vida.
Leo en los diarios que continúa el frío polar en Argentina, Rosenwasser me cuenta que en Santiago están todos metidos en sus casas con 3 grados de sensación (¿se dice “térmica” en estos casos también?), máxima de 13 grados en BA.
Hace un rato, cuando salimos de la pileta (cubierta) con El Opinadorito, la temperatura era de 13 grados también, y la gente de pantalón corto, remera y ojotas.
Ah, sí, acá la gente es como si estuviésemos en una base antártica.
ReplyDeleteDe todas formas, yo soy lo contrario de friolento (y así la paso en los veranos porteños, como ermitaño y con acondicionador de aire) pero no salgo de short con 13ºC, quizás sí con remera.
Lo que es la costumbre.