El gobierno provincial de Québec subsidia las guarderías. Fija el precio, 7 dólares por día por niño (eran 5 hasta hace un par de años), nadie puede cobrar más que eso, y les entrega un subsidio por la diferencia.
Como sólo hay dos maneras de asignar recursos, por precios y por racionamiento, a pesar de los constantes aumentos de presupuesto y de las promesas de los políticos, la provincia sufre una escasez crónica de plazas. Es muy común que los futuros padres anoten a su bebé en listas de espera en cuanto se enteran del embarazo.
Yo creo que en el fondo la burocracia local sabe perfectamente que tal como está planteado, el sistema no tiene solución y está condenado a la escasez. En algún momento habría que dejar de subsidiar la oferta y empezar a hacerlo con la demanda.
En lugar de que los padres paguen 7 dólares por día y que el gobierno le entregue la diferencia del costo real a las guarderías, deberían liberar el precio diario por niño y entregar el subsidio directamente a los padres en forma de un certificado (las personas sin hijos o que no los manden a la guardería deberían pagar menos impuestos). Los padres que no puedan o no quieran pagar más de 7 dólares por día por niño, deberán esperar a que aparezca una plaza, como ahora. Los que estén dispuestos o estén en condiciones a pagar más de 7 dólares, conseguirán un lugar mucho más rápido.
Al mismo tiempo, volverán a aparecer guarderías que ofrecen servicios diferenciados y/o de mayor calidad, como atención a niños con necesidades especiales como autismo, que desaparecieron por la prohibición de cobrar más de 7 dólares por día, aún con el acuerdo de los padres.
Increible lo que contas Louis.
ReplyDeleteParece que la elección es vivir en un socialismo eficiente donde pasa lo que contás, o uno ineficiente estilo Argentina, donde los controles o bien corren desde atrás o bien fallan y tenes opciones en la informalidad, pero pagando otros costos.
Las políticas socialistas son una joyita: caras e inútiles. Y, como las joyas, son un lujo que se pueden dar únicamente los que tienen altos ingresos. Québec se puede dar el lujo de despilfarrar recursos en cuestiones como esas porque es una sociedad de altos ingresos. Pretender hacer lo mismo en un país de bajos ingresos como Argentina es condenarse a la pobreza.
ReplyDeleteLouis, creo que tenés una visión demasiado angelical, por las cosas que contás, Canadá será parecido a la Argentina en unas pocas décadas.
ReplyDelete