Esta mañana leía una entrevista a Ricardo Guibourg, filósofo del derecho y juez de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo, de la serie “Los intelectuales” de La Nación. Dice cosas muy sensatas, pero me quedó grabada esta parte:
¿El sistema está colapsado?
Yo creo que sí. Hay un colapso en el sistema, pero no sólo en el sistema jurídico, sino también en el sistema social. Una de las fuentes más fecundas del delito es la desigualdad social. No la pobreza. Como nuestra sociedad no tiene miras de obtener mayor igualdad social, tampoco tiene miras de dejar de fomentar el delito.
Hoy a la tarde leo en el mismo diario que dos delincuentes encapuchados entraron a robar a una casa en el GBA, encerraron a todos en el baño y manosearon a una niña de cinco años.
Una niña de cinco años.
Don Guibourg, ¿eso también es producto de la desigualdad social?
Y aún si lo fuera, ¿qué hacemos mientras tanto? ¿Nos resignamos a ser carne de cañón de cuanto delincuente se le ocurra jugar a Dios con nuestras vidas y nuestras propiedad?
"Hay que eliminar a los ricos". El mismo verso de siempre, ya cansan.
ReplyDeleteEl mismo verso RESENTIDO de siempre. Me faltó eso.
ReplyDeleteSeguramente estarìan manoseando a sus propias hijitas en sus casas, si no tuvieran que salir para conseguir "justicia social". Por eso habrà sido. Ustedes no comprenden!
ReplyDeleteQué explicación tendrá ese filósofo del derecho para los delitos sufridos por los pobres cometidos por otros pobres?
ReplyDeletePablo
Aparentemente el principal factor no es la pobreza sino la desigualdad social. Si en Argentina todos fueran igual de pobres, la cosa mejoraría.
ReplyDeleteY el descerebrado del padre no tiene mejor cosa que hacer público por TV lo que le pasó a la hija.
ReplyDelete¿No pensó que la publicidad no ayuda absolutamente en nada a su hija para superar el trauma de una experiencia así?
Un caso como éste se trata en privado y con especialistas y no se expone a la víctima a la luz pública. Pobre chiquita si el padre la proteje así siempre.
buen punto Mr. Masked!!
ReplyDeleteMe pregunto si el juez será pobre, como unos cuantos jueces en Argentina, que tienen ingresos por 10, 20 o 50 veces su sueldo.
ReplyDeleteY es cierto, es la desigualdad la que fogonea la violencia, además de la pobreza. Le llenan la cabeza a los pobres con la idea de que lo que tienen los ricos se los han quitado a ellos, este es el resultado.
Y además de hacer eso, destruyen la economía y los pobres poca oportunidad tienen de dejar de serlo.
Sumamos a ello la cultura del clientelismo, del sindicalismo matón, una hecatombe cada 5/10 años, y tenés la realidad de hoy en las calles.
Otro comentario bajo la noticia:
ReplyDelete"# Estoy contemplando azorado todo el desenfreno vengativo que sabe desatar un medio avezado como este en el arte del golpe de estado. Con sólo deslizar un concepto equívoco y confuso como "abusado", referido a una niña de cinco años, ya hay gente que predica el exterminio de TODOS en las villas miseria, señalando cuál es su monstruoso concepto del delito: la pobreza. El supuesto delito aberrante se infiere de esta frase: "su hija le contó que la manosearon". Nadie acá oyó a la niña, nadie vio el hecho, pero ya hay brigadas de "incendiarios" clamado venganza por la "violación" ¿Qué intentan tapar ustedes de sus propias conductas con estas sobreactuaciones? Entre estos foristas hay varios infelices ansiosos de cometer aberraciones violentas pero, incapaces de hacerlo por su cuenta, promueven la indisciplina social, el motín, linchamiento, la hoguera y todo lo que hagan OTROS. Señor moderador: haga respetar la Ley."
"Un medio como este avezado en el arte del golpe de Estado".
Y dale que vaa.
"¿Qué intentan tapar ustedes de sus propias conductas con estas sobreactuaciones?"
Un negrito bardero ilustrado?
DIOS MIO. Y se nota que ese infeliz es bastante instruido. Dios nos libre.
La duda de siempre, ¿son esos comentarios representativos del estado mental del argento promedio? Yo me temo que sí.
ReplyDeleteSí, clase "media" con estudios universitarios.
ReplyDeleteLos que son más rasos no hablan esas idioteces y molerían a palos a los victimarios, pero deben estar más pendientes de su propia supervivencia.