Una de las cosas que me parece de las más peligrosas de Kirchner es haber vuelto a instalar el odio y el resentimiento como motivación política en el país. El tipo juega con fuego.
Es como entrar a repartir tetra en una reunión de Alcohólicos Anónimos o cajas de Tres Patitos y bidones de Fangio XXI en una sesión de terapia grupal para pirómanos.
Sé que le importan tres pepinos los derechos humanos y que usó descaradamente a la izquierda delirante y a la progresía de ínfulas sofisticadas para seguir con la manija, pero también creo que fomentar el odio y el revanchismo como proyecto político es suicida.
Sobre todo con los antecedentes del país en el uso de la violencia como método político.
No comments:
Post a Comment
Note: Only a member of this blog may post a comment.