Esta mañana leía esta noticia, me hizo acordar JL:
Se suicidó un funcionario en pleno allanamiento por corrupción en Santa Fe.
Pensé que ya no quedaban políticos así.
Corrupción hubo siempre en Argentina, pero el kirchnerismo tiene el orgullo de estar entre los primeros en practicarla a plena luz del día, orgullosamente, y vendérsela como justicia social y dignidad a millones de argentos con el cerebro reblandecido por el odio y la envidia.
El problema es que si es un ejemplo para imitar, habría un suicidio en masa de la clase política y dirigentes de distinto pelaje.
ReplyDeleteOjo que los tipos se suicidan únicamente cuando los investigan y la cosa puede salir a la luz.
ReplyDeleteAl fin encontramos un prócer!
ReplyDeleteAdrián Sarramona, el Belgrano del bicentenario. Hay que hacerle un monumento!