Justo en el medio de un tira y afloje fenomenal entre los gremios del sector público, que reclaman aumentos de salarios y mejoras en las condiciones de trabajo, y el gobierno, aparece la noticia de que el 30% de los ancianos de la provincia sufrirían algún grado de desnutrición.
Anoche veía en el noticiero a miembros de los sindicatos que amenazan con paros para reclamar mayores salarios (que ya son 30% superiores a los del sector privado) – lo que implica necesariamente aumentos más impuestos al sector privado (el único que genera riqueza) - reclamando más presupuesto para hacerse cargo del problema.
La plata no alcanza.
Se mueren los ancianos.
Se mueren los niños.
Se mueren los discapacitados.
Únicamente un malnacido puede oponerse.
¿Es una casualidad que el problema se haga público justo en este momento, en el medio del conflicto? Ustedes me disculparán, pero yo creo que no.
La solución siempre es más presupuesto (ergo, más impuestos o más deuda). Jamás escuché plantear la cosa al revés: ¿cómo puede ser posible que con la plata que se gasta en la provincia en salud y cuestiones sociales el 30% de los ancianos esté desnutrido?
En cualquier empresa privada se trataría de una clara admisión de una incompetencia monumental y los echarían a patadas ya saben dónde.
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