Más sobre el intercambio entre Montaner y Silvio Unicornio Rodríguez:
Según los esquemas del aparato, los artistas en Cuba, a cambio del sustento del Estado, que a veces acarrea gloria, fama y ciertos privilegios, deben limitarse a repetir consignas y seguir fielmente las pautas de la dirección ideológica. No se les paga para pensar por cuenta propia y mucho menos para expresar sus dudas. Los buenos revolucionarios no dudan. Aplauden y sonríen.
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