Bautizarse en el escaso y embarrado caudal del río Jordán es un riesgo para la salud que podría prohibirse hasta que se reduzcan los niveles de contaminación, que superan en cuatro veces los permitidos.
El Ministerio de Sanidad israelí ha ordenado unos análisis que determinen los niveles de bacterias en el bajo Jordán y, mientras se esperan los resultados, dará instrucciones para que se advierta a los bañistas de que las aguas están contaminadas y se prohíba bañarse en ellas.
En ese tramo del río se encuentra el lugar, cerca de Yériho, donde, según la tradición cristiana, San Juan bautizó a Jesús.
Miles de creyentes acuden cada año a ese punto del río para sumergirse en sus aguas y revivir ese acto de fe.
Hoy por hoy, bañarse en esa zona del Jordán es insalubre.
Más que insalubre, yo diría que es un asco.
Bueno, como a Israel se le aplica siempre el 'palos porque bogas y palos porque no bogas', si sale la prohibición dirán que es por la intolerancia religiosa de la 'entidad sionista', y si no sale... por una irresponsabilidad tremenda del gobierno.
Todo el mundo sabe quiénes son los que derivan al río aguas servidas sin tratar, pero de eso no se habla.
Raquel Reznik
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