¿Un destacado estadista?
No, era un gobernador peronista de tercera línea hasta que se encontró con la presidencia en el mejor momento de los precios internacionales de los últimos 100 años:
En la plenitud de la declinación, Kirchner los arrastra. Los envuelve. Se las ingenia para someter a los adversarios. Voltea muñecos por doquier, con una facilidad estremecedora. Se lleva puesto lo que se proponga y lo que se le oponga. Los objetivos prioritarios fueron dos. Héctor Magnetto y el Cardenal Bergoglio. Por la reacción inocente de sus defensores, puede percibirse que se lo lleva puesto, también, a Mauricio Macri.
En los tres casos, Kirchner es inquietantemente ayudado por los errores que cometieron los adversarios.
Kirchner es la demostración de que el liderazgo autoritario es el que funciona en Argentina, por supuesto, sostenido con plata, el verdadero garrote.
ReplyDeleteEl error del planteo es considerar que los rivales de Kirchner también son geniós, entonces sólo un supergenio podría superarlos.
ReplyDeleteQue Néstor embrete a Macri sólo confirma el nivel de la Gran Esperanza Blanca.