Fracaso monumental:
En una fracción de segundo, viajando por el océano de la memoria, apareció la cara de su abuelo (el señor González, originario de Asturias, España) diciendo: "Nosotros vinimos a la Argentina, querido, porque allá en nuestra tierra había hambre. Este es un país rico, y generoso. Acá tiran la comida a la basura. No saben las que hemos pasado los españoles, los italianos, los sirios, los polacos, los alemanes, los irlandeses. Aquí en la Argentina se ganaban fortunas. ¡Uno podía construirse su propia casa! Así fue que progresamos, trabajando duro. ¡Y eso que éramos analfabetos! Calculá vos, hijito, que estás en la Facultad. Tienes un gran futuro, hijito, un grandísimo futuro..."
Yo a la noche, si la esquina o toda la calle es oscura, bajo a velocidad prudencial, suficiente como para ver que novengan otros vehículos, y cruzo en rojo.
ReplyDeleteY que me echen un galgo.
Idem
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