¿No les parece que llegó el momento de terminar de cuajo con este disparate?
Ni siquiera es una cuestión de orientación ideológica, se trata del más básico sentido común. No hay sistema que aguante si dos o tres pajaritos son capaces de paralizarlo cuando mejor le venga en ganas.
Espero que lo hagan antes de que sea demasiado tarde.
Es que dentro del delirio argentino, hasta esto se convirtió en una cuestión de izquierda o derecha. El progresismo que busca cualquier excusa para denostar a Macri, es capaz de justificar a un grupo de adolescentes que hace lo que quiere con la propiedad pública, en nombre de la "militancia" cuando es algo tan básico que hay ámbitos para la educación y otros muy distintos para hacer política.
ReplyDeleteAparentemente buscar la convivencia civilizada ya no es un objetivo de gran parte de la clase política, sino todo lo contrario.
la noche de los crayones
ReplyDeleteHay una propuesta: "Un grupo minúsculo de pendejos debidamente aleccionados, se toma la atribución de tomar un colegio y negar el acceso a sus supuestos pares, que pretenden ingresar para cumplir con el ciclo obligatorio y no obligatorio… ¡también a los padres de éstos!, y a todo aquel que pretenda acceder a ese colegio. Como reza aquella famosa frase, “la culpa no la tiene el chancho, sino quien le da de comer”, y a éstos pendejos, hay evidentemente quien les da de comer y sobradamente. ¡Claro!; esta situación, impensada hace no tantos años, se habría resuelto en el mismo día. ¿Cómo me pregunta?; simplemente ¡sacándoles a patadas en el culo! Así como crudamente se lo digo y como Ud. bien lo sabe, salvo haya sido parido por un repollo, frase que ensayaban algunas viejas de la época… de la época en la que su hijo y el mío cursaban el ciclo primario y secundario… ¡no le hablo de la época de las Cruzadas!... ¡tampoco de la época de los militares!, y le hago ésta última salvedad, porque está de moda embocarles en cualquiera situación que implique “abuso de autoridad” o “represión ilegal”. Entre paréntesis, aprovecho para recordarle, así ya lo haya intentado, que la palabra represión, según el diccionario, merece una sola acepción…”restablecer el orden”. ¡Ahora Ud. me dice que estoy haciendo la apología de la “sacada a patadas en el culo”…! Puede que tenga razón, es más, lo admito, no sin recordarle que la “sacada a patadas en el culo” en sí, no constituye delito. Sí en cambio constituyen delito, una serie de prácticas que se llevan a cabo desde el mismísimo gobierno nacional, como por ejemplo, toda aquellas que reúnen los ya recurrentes hechos de corrupción, enriquecimiento ilícito, incumplimiento de los deberes de funcionario público, incitación a la violencia, desacato, un Gobernador que admite no poder actuar contra el delito por “estar atado de manos” (???). El resto memorícelo Ud., y hágase cargo de la arcada o el vómito que le provoque.
ReplyDeleteAhora lo dejo, no sin antes aclararle y para su tranquilidad, que “la sacada a patadas en el culo”, en lo personal, la llevaría a la práctica sin zapatos y con medias de algodón.
Ricardo Jorge Pareja"
Y te aclaro que estoy completamente de acuerdo...
en http://www.informadorpublico.com/Cartas_de_lectores.html
Francisco, en algún momento el país va a tener que dejar el papel de señor cincuentón que se empeña en comportamientos y problemáticas de adolescente de 15 en mal momento del mes.
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