Quintin = prostituta quejosa

Un tal Quintin escribe en Perfil todo encocorado con la directora del INCAA Liliana Mazure (Enterobius vermicularis), porque en su discurso de clausura del festival de Mar del Plata, esta señora :

[...] incluyó en su discurso una serie de comentarios inatingentes, absurdos para el encargado de la palabra oficial frente a un público en el que abundaban cineastas extranjeros y ciudadanos argentinos a los que –por ahora, al menos–la ley no les prohíbe ser opositores. Mazure pareció hablar para complacer a quienes comparten su posición política, para recordarles quién manda en la Argentina a quienes no lo hacen y para sumergir en el desconcierto a los visitantes. No se limitó a señalar los logros del Gobierno ni a subrayar su apoyo a Cristina Kirchner, sino que incluyó frases de bienvenida a La Cámpora y otras agrupaciones juveniles del oficialismo (no quedó claro qué función cumplían en el festival estos militantes) y hasta aludió a la victoria de la agrupación kirchnerista “Arturo Jauretche” en las elecciones del Centro de Estudiantes del Colegio Nacional de Buenos Aires.

Lleno de justa ira, Quintin clama contra quienes usan los dineros públicos para hacer propaganda estatal :

[...] estos son tiempos en los que las declaraciones del nuevo director de Télam invitan a la comparación con Raúl Apold, el tristemente célebre patrón del cine, la radiofonía y la propaganda oficial del primer peronismo. En verdad, no veo ninguna necesidad de ejercer esta especie de totalitarismo light en los festivales de cine, de recurrir a esos procedimientos sectarios y excluyentes [...]

Todo muy noble, un verdadero Hank Rearden. Pero en la siguiente frase y sin cambiar de andén, revela cándidamente que :

Tal vez lo más grave de este discurso trasnochado sea que pase de largo sin escandalizar a nadie. Es cierto que nos hemos acostumbrando demasiado fácilmente a la prepotencia oficial, pero también influye en este silencio una particularidad del mundillo del cine argentino. Casi sin excepción, los cineastas, productores, actores, empresarios, técnicos y hasta periodistas que nos congregamos cada año en Mar del Plata recibimos beneficios del Estado a través del Incaa, aunque más no sea la invitación a pasar unos días en la Perla del Atlántico con alojamiento gratis.[...]

Para ponerlo en castilla, Quintin querido, si te pagaron para que entregues el rosquete, no te quejes del ardor posterior. Y si quien te sodomiza se trae algunos amigos a la fiesta sin avisarte, bancatela. TANSTAAFL.