Como nota de color, les cuento que hace unos años se proyectó en el auditorio de una universidad local y que a la función asistieron numerosos miembros de la colectividad nacional y popular que después tuvieron serias dificultades para explicar al público quebeco cómo era posible que alguien se robe cifras en dólares equivalentes al PBI de Canadá en un país con una economía que es una fracción de la canadiense:
Eso no es lo único asqueroso. Estoy haciendo el curso de ingreso en la Facultad de Bellas Artes en la UNLP y ayer, en la clase del día en una de las materias, nos llevaron a todas las comisiones al auditorio para hacernos ver una película de ¡Pino Solanas! Creo que era "Memorias del saqueo". Un documental pedorro de aproximadamente dos horas y pico en el que la voz en off de Pino nos contaba lo nefasto que fue el menemismo, lo malas que son las privatizaciones (porque regalamo' lo nuestro por chirolas, vio) y cómo, durante ese gobierno, se cometió el crimen de lesa humanidad de "desmantelar la cosa pública", mientras se mostraban imágenes de extrema pobreza y reportajes a indigentes. Fueron diez capítulos en los que Pino se vistió de economista para hablarnos pestes del "neoliberalismo" (porque lo' shanki' y el Fondo nos imponen recetas para llevarse nuestras riquezas), que aumentó la "deuda eterna", etc. Se pasaba por la época de Menem, de Alfonsín para terminar en todo el despelote de diciembre de 2001. Zurdaje full-full y 100 % nacional. Faltaba que dijera "Pino 2011", nomás.
Como la gente promedio no tiene ni la más puta idea de cómo funciona la economía, de cómo gira el mundo, no sabe de ideologías ni de experiencias similares, al terminar la película hubo gran cantidad de aplausos.
Ah, y después hay que responder cinco preguntas acerca del "film". Juro que fue repulsivo.
Adoctrinamiento que le dicen. Es un milagro que no salga alguien de la UBA hecho un zurdo/fascista. Esa extraña mezcla de nacionalismo, socialismo y marxismo que se respira en la UBA, no es más que fascismo. Cambiá a los judíos por los yankies y voilá.
ReplyDeleteLe están pudriendo la cabeza toda una generación de argentinos.
ReplyDeleteAhora, más en frío, escribo nuevamente. Yo entiendo que la universidad sea estatal y que los centros de estudiantes sean de izquierda. Es más, creo que no me molesta que piensen como piensan, ya que por lo menos te ayudan con información importante que, a veces, la misma facultad no te da (referente a horarios, fechas de exámenes, ayuda con algunas materias).
ReplyDeleteLo que me parece asqueroso es el intento de cooptar voluntades prescindiendo del debate. No dejan al futuro votante elegir libremente entre todas las ideologías: te muestran (o imponen) una sola (la misma de siempre) y te compran con imágenes desgarradoras. El relato siempre se fabrica con forma de izquierda. El culpable, siempre el mismo. Después el ignorante va al cuarto oscuro y así vota.
Lo mismo que ocurre en las facultades pasa en todos los ámbitos, sobre todo en los medios informativos, sean de radio, prensa o TV. Los debates (si los hay) pasan siempre por el mismo lado.
Particularmente, me es imposible sostener un debate con una persona que opina como Pino. Me refiero, por supuesto, a la gran mayoría de los argentinos. Para ellos, es -como vos decís, Louis- una cuestión de fe. Me siento sapo de otro pozo.