El colectivismo, como sistema económico, ha fracasado. Rotundamente. Así acaba de admitirlo, sin vueltas, el propio Raúl Castro, en Cuba, aunque sólo después de sumir a su pueblo en la peor de las miserias, postergándolo por espacio de medio siglo.
No obstante esa dramática admisión, algunos izquierdistas radicales -en su fanatismo ciego- no se han anoticiado siquiera del drama humano de lo que significa para la dignidad de la gente lo que ha sucedido en Cuba. Entre ellos, Hugo Chávez y su discípulo dilecto, Evo Morales. Ambos creen que con levantar el puño desafiantes basta para movilizar a la gente. Para hacerla soñar, al menos por un rato, con la irrealizable utopía que proclaman.
No será culpa de Estados Unidos?
ReplyDeletehombre de poca fe!
ReplyDeletecon el modelo narc&pop vamos pa'lante!
Al final, este Castro, resultó ser un cipayo de aquellos, vendido al oro extranjero.
ReplyDeleteEl 6 de Enero ya pasó...
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