La vez pasada me contaban una anécdota de un fanático del “modelo”

Viven en el GBA y no sé cuántas veces los asaltaron y secuestraron. Lo bueno es que hasta ahora la sacaron barata, todavía no los mataron.

En uno de los últimos episodios iba el hijo mayor adolescente con un amigo por la calle. El amigo iba vestido normal y este chico medio zarrapastroso (casualmente para evitar los robos). Los paró un tipo con una pistola, en plena calle, en plena luz del día. Le sacó el reloj, billetera, zapatillas y demás al amigo y a este chico no le llevó demasiado el apunte por la pinta que tenía.

Por lo tanto, en la mente del fanático del “modelo”, el episodio no cuenta como un hecho de inseguridad. Lo asaltaron al amigo, a su hijo no.

Como para reforzar la impresión de que en realidad estamos lidiando con cuestiones más emocionales que racionales.