La municipalidad local

Acaba de anunciar que a partir de abril la recolección de basura será cada tres semanas, en lugar de cada dos como hasta ahora.

Lo venden como un tema ecológico (pretenden obligar a los contribuyentes a meter los restos de comida en el tacho marrón), pero el intendente admite que el principal motivo es económico: la ciudad ahorrará más de un millón de dólares por año con la medida.

La vez pasada hablábamos de que para el sector privado quebeco – el único que genera riqueza - es imposible seguir financiando el ritmo actual de aumento del gasto público/tamaño del estado. Pero eso es sólo una parte del problema.

El estado cada vez gasta más en áreas en las que no debería meterse y no le alcanza para cumplir con sus funciones esenciales. En lugar de seguir dilapidando la plata de los contribuyentes en, por ejemplo, un servicio de colectivos urbanos proporcionados con recursos propios, deberían ocuparse de cuestiones como el arreglo de baches (anunciaron que la plata no alcanza y sólo van a destinar un tercio del presupuesto que hace falta para la tarea), el retiro de la nieve y la recolección de la basura.