Éramos tan jóvenes, qué cosa.
Mi abuelo me mandaba al supermercado a comprar leche, pan y jamón cocido y se ponía hecho un basilisco. Al precio oficial no había. Para que mágicamente hubiera había que ponerse con el precio libre, que al principio aumentaba todos los meses y después varias veces al día.
Me acuerdo que en los 90, cuando estábamos mal y no teníamos dignidad, leí un artículo en una de esas revistas que venían con los resúmenes de las tarjetas de crédito (no me acuerdo si era de Diners) sobre cómo los precios máximos del “Plan Austral” habían prácticamente destruido la industria de chacinados de calidad en el país. Al no poder cobrar un precio de mercado, el jamón cocido se había convertido en un bodoque de harina, desechos de cerdos, sal y colorante.
En los primeros años de los 90, en la facultad había que tomar una ristra de Lexotanil para escuchar a la perrada de Franja Morada explicando que el “Plan Austral" había fracasado por a) un complot de los grupos financieros del país y b) porque a los argentinos les había faltado garra para ponerlo en práctica como se debía.
En el instituto donde enseñaba me pagaban en bonos provinciales. Más allá de que había que renegociar el sueldo todos los meses, para que no se atrase demasiado, en cuanto recibía la plata salía corriendo a comprar comida o lo que sea en el supermercado para sacármela de encima cuanto antes.
Cero proceso de aprendizaje.
Cuando los hechos no se ajustan a nuestras ideas preconcebidas, lo -por lejos- menos doloroso (al menos para esta gente para quienes sus ideas implican su identidad) es "adaptar" los hechos.
ReplyDeleteJL
Diálogo entre mi tía y su carnicero, allá por los mágicos y surrealistas 80's (situación real):
ReplyDelete- Mi tía: (mostrando el recorte del diario) "Buen día, por favor necesito dos kilos de nalga al precio que salió publicado en el diario".
- Carnicero: "No, Sra, no se enoje, pero no hay a ese precio".
- Mi tía: "Pero, ¿cómo? Lo dice acá, bien clarito...".
- Carnicero: "Sra, si no le gusta, vaya a comprar nalga al diario"...
El bodoque ése que vos describís se llama "paleta sandwichera" . No me extraña que lo hicieran pasar por jamón cocido ya que de lejos se parece algo.
ReplyDeleteRecuerdos de dignidad alfonsinista!
ReplyDeletecuando era chico me fijé el precio del helado y le pedí plata a mama.
hice la cola para comprar el helado, y cuando estuve por llegar el heladero aumentó todos los precios.
le dije, pero si hace un ratito estaba a ese precio por favor que me lo venda. Se negó rotundamente.
Ni le pedí la plata a mi vieja para saldar la diferencia, estaba seguro de que iba a hacer la cola y de nuevo la plata no me iba a alcanzar.
Así era todo, los precios aumentaban varias veces por día. Buscar precios era algo que no tenía sentido, porque no había nada más caro que demorarse un ratito; tu dinero y esfuerzo se esfumaban a una velocidad impresionante.
Al final voy a pensar que Uds. son una manga de neoliberales.
ReplyDelete¿Se olvidan de la Dignidad que hay que tener para consumir esas basuras producto de los precios máximos y de la eliminación de la competencia?
La inflación en 1989 fue del 4.923 %... de la dignidad.
ReplyDeleteYo me casé el 15/7/89, justo cuando se cumplían 200 años de la Revolución Francesa. Plena híper, pero ya teníamos todo proyectado, contratado, etc., no había vuelta atrás.
ReplyDeleteTeníamos todo para estar dos semanas de viaje de bodas a Bariloche. Habíamos sacado para dos semanas. Al día siguiente de llegar nos dimos cuenta de que, o hacíamos dos semanas comiendo sánguches de mortadela y no saliendo a ningún lado, o hacíamos una semana pero bien. Hicimos una semana. Gracias, Alfonso, rest in peace.
JL
JL: me acuerdo perfecto de esa fecha. Yo estaba en 3er año del ILSE (frente a Tribunales). Iba y volvía a casa en subte, línea D. El Estado nos había dado un carnet para pagar menos el cospel. Parche por aquí, parche por allá. Igual que ahora. Mis viejos trabajaban en el Hospital Posadas y, cuando cobraban a fin de mes, recibían chauchas y palitos. Menem había asumido el 8-jul, me acuerdo de su discurso ante el Congreso: yo quedé de boca abierta. A pesar de mis 15 años, me interesaba muchísimo la política. Recuerdo la charla con mi viejo durante el discurso: "si hace la mitad de lo que dice, es un éxito"...
ReplyDeleteUstedes no tienen compasión, venir a criticar así al padre de la democracia... don Raúl Ricardo, pedazo de hijo de puta, estarás reunido con el Néstor para voltear el gobierno de Satanás?
ReplyDeleteEl Padre De La Democracia se llama Margaret Thatcher.
ReplyDeleteExactly Klaus.
ReplyDeletePero para le perrada, se enterró a un prócer... y al poco tiempo otro.
hablando del "padre de la democracia" , cuando se murio el papa de Ricardito , postee esto ( muy en linea con lo de Margaret Thatcher), y con el falso procer:
ReplyDeletehttp://www.bajauncambio.com/2009/04/parece-que-muertos-somos-todos-proceres.html
Me acuerdo de la epoca de la híper. Por entonces tendría 5, 6 años. Íbamos al supermercado y le preguntaba a mi vieja qué significaba la "inflación". De lo poco que entendía de su explicación, mi conclusión era que por qué no resolvía el gobierno el problema haciendo más plata. Si el problema era que la plata no alcanzaba, lo obvio era que el gobierno hiciese más y la repartiese, así todos podrían tenerla para poder comprar cosas. Y si los precios subían más, que hiciesen más plata, así la gente podría seguir comprando.
ReplyDelete¿No resulta entre gracioso y triste que el gobierno actual utilice la misma lógica que yo a los 5 años?
Gabo, en el mundo hay literalmente cientos de millones de persona que viven convencidas de que la riqueza se genera por decreto.
ReplyDeleteLuis, "Que Dios nos ayude".
ReplyDeleteAndrés
Oh... la híper... bellos recuerdos... recién recibida, mi primer trabajo... no me alcanzaba ni para pagar el colectivo para llegar allí... en tres meses sólo pude juntar algo para comprarme un par de zapatos, berretísimos, pero eran los que se usaban en ese momento!
ReplyDeleteAndy, ¡volviste! Por acá se especulaba con un viaje.
ReplyDeleteAndrés, si los argentinos no se ayudan a sí mismos, ni Dios los salva.
ReplyDeleteEsto es deprimente, ¿todos eran unos péndex en la época de la gloriosa híper?
ReplyDeleteDefinamos pendex... Calificaría con meses de vida?
ReplyDeleteQue Dios lo tenga en el infierno al sorete del Alfonso.
ReplyDeleteMi viejo tenia una casa de comidas y cuando pusieron los precios maximos no solo destrozaron la industria de chacinados, tambien la lactea, sobre todo la de quesos y el comercio medio y chico de alimentos en general.
Primero todo venia con doble boleta, la primera con el precio maximo y la segunda, en negro, con el precio real del producto.
Productos que le sacaron calidad a niveles asombrosos. Como bien pones en la nota, los jamones cocidos, a los dos dias de abierto se ponian todos babosos y chorreaban agua por todos lados. No te duraban una semana en la heladera.
La leche (Serenisima, imginense las otras) se cortaba antes de la fechas de vencimiento.
Los quesos fue lo peor, los frescos tenian la consistencia del miki moco y los duros no se conseguian en ningun lado.
Me acuerdo haber ido a Turdera y Guernica para conseguir unos quesos caseros, que eran aserrin, pero era lo que habia.
En lo de un amigo de mi viejo que fabricaba aderezos pude ver y oir a un inspector (que caian todos los dias solo para coimearte aprovechando el poder que tenian) "ordenandole" al hombre "Tenes que cumplir con los precios maximos, si no te dan los costos, metele mierda".
Tipico pensamiento argento.
Otro dia les hablo de los dias de la hiper (el 2001 fue un poroto al lado de eso).
Beto, ¿cómo te explicas que otra vez vuelvan a lo mismo convencidos de que esta vez seguro que sale bien?
ReplyDeleteComo soy un poco más viejo yo tengo muchas anécdotas del desastre alfonsinista: Trabajo en sistemas, en ese tiempo en una financiera, tuve mucho trabajo agregando un decimal más a los importes porque había que tener en cuenta el medio centavo que era obligatorio (sin palabras). A los pocos años llegó la hiper, un dia en disco encontré el mismo producto con dos precios, le dije a un empleado, lleve el más barato me contestó. Yo había empezado a trabajar por mi cuenta, la tasa de interés era tan alta que tuvimos que agrandar el campo de la tasa porque superaba el 999% anual. Con el anticipo que cobré de un trabajo (nada extraordinario) hice un plazo fijo a fin de ese mes, los intereses eran superiores a la suma de los sueldos de mis 3 o 4 empleados. Por la tele apareció Cavaieri en el programa de Neustad agitando un billete de u$s 100,-"Necesitamos que el sueldo sea por lo menos esto" gritaba. Lastimoso.
ReplyDeleteMiguel, y a pesar de semejante locura, sigues escuchando a pajaritos que te dicen que la inflación no es un problema.
ReplyDeleteLouis, estos tipos repiten el mismo patron de conducta porque se creen infalibles, dueños de la verdad.
ReplyDeleteY, como alguien posteo antes, cuando su sistema perfecto se cae a pedazos, ellos nunca tienen la culpa, siempre son los de afuera (CIA, KGB, los Boys Scouts) o lo que es peor, le echan la culpa al pueblo porque no "entiende" sus ideas de avanzada.
Yo tambien tengo la teoria que se comportan impunemente porque nunca sufrieron la ira de nadie (y no me refiero a los militantes sino a los que cortan el queso).
Aca murieron y fueron presos militantes, militares, sindicalistas, empresarios, gente de a pie, pero los politicos siempre zafaron, simpre transaron con el poder de turno, por eso se creen inmortales.
El Nestor es el ejemplo perfecto.
Transo con todos, y hasta el ultimo segundo de su vida se creyo eterno.
Sería bueno que alguien explique hoy por qué se es radical. Los peronistas, bueno, representan algo, repugnante pero exitoso políticamente.
ReplyDeletePero, ¿qué es hoy ser radical? ¿Cómo puede alguien hacerse radical salvo, digamos, por herencia familiar?
Es que el radicalismo es eso, puro ADN, camiseta tatuada. No hay otra explicación. Eso si son coherentes, tienen la ineficacia como condición curricular para afiliarse.
ReplyDeleteLos radicales están convencidos de que representan el peronismo bueno.
ReplyDeleteYo soy de familia radical, pero "abandoné" la tendencia genética (se puede) cuando vi a RA caminando con Carlos Saul I ( en camino a ser II) de Anillaco. Algo básico creo, es que los radicales son socialistas de alma, algo así como primos de los Peronistas que vienen a ser fascistas moderados. Basicamente son aficionados a modelos más o menos moderados de IngSoc.
ReplyDeleteLo que los radicales tenían de liberales lo perdieron con don Hipólito. También cualuquier noción de economía y administración básica.
Recuerdo ir a comprar un alfajor jorgito con 1millon de pesos colorados. Recuerdo que los yogures se podrían. Recuerdo los cortes de luz. Recuerdo como un mes de paro de maestros. Recuerdo a los Peronchos desfilando por lo del tio Bernie. Puteando a Terragno por las privatizaciones y despues aplaudiendo a Dromi. Recuerdo a mis tías viejas que me hablaban en australes cuando eran pesos. Entonces decían algo así como 5000 australes por 5 pesos (era así no?).
Recuerdo que la caja de ahorro que me habían abierto muy de niño no servía para un carajo. Recuerdo siempre que los costos de todo se calcularon en dolares.
Mis sobrinos tienen 18,13,11,9,8,7 , me resulta imposible explicarles que no se tienen que guardar la plata (algo contrario a lo que le enseñaba al de 18) para comprarse algo.
El de 18 quería juntar para comprarse una compu durante el verano. Me dice, si medio año llego. Pobre.