Eran kamikazes absolutos. Con el nivel de corrección política actual, jamás hubieran llegado a la luna.
¿Se imaginan si hubiera sido al revés? Si EE.UU. (con Sheppard o alguien más) hubiera llevado a cabo el primer vuelo orbital y Khrushchev hubiera lanzado la carrera espacial, en lugar de JFK?
Ya lo hablamos en algun momento por aca, si bien estoy abandonando mi descreimiento, por mucho tiempo fui muy esceptico de que se haya llegado a la Luna at all...
ReplyDeleteDe hecho se dice que existieron vuelos anteriores a los de Gagarin, pero fallaron, y los cosmonautas, usados como conejillos de indias, murieron. La Unión Soviética sólo dio a publicidad su primer vuelo exitoso.
ReplyDeleteGuillermo, leí lo mismo. Es más, aparentemente Gagarin se salvó de casualidad.
ReplyDelete¿Y la perra Laika?
ReplyDeletePara mi es fue y será quemar la guita de los contribuyentes.
ReplyDeleteComparto lo de Benegas. Mi lado infanto-juvenil se entusiasma con las misiones espaciales, pero deberían ser iniciativas privadas.
ReplyDeleteCreo que ya lo dije por acá, pero en el programa MythBusters desmitificaron todas las especulaciones de los anti-alunizaje con pruebas sólidas. Ergo, el viaje a la Luna no solo fue posible, sino un hecho verídico.
Yo veo muchos privados poniendo millones y millones de dólares para hacer agujeros en la Tierra (para sacar petróleo, gas, metales, etc..) y no veo a ningún privado financiando viajes a la Luna... debe ser que los viajes espaciales por ahora son tirar plata, una paja adolescente. Lo rescatable es que mucha tecnología que fue desarrollada por la NASA (mismo también por el pentágono: internet, GPS, etc) hoy es de uso público. Nunca sabremos cuanto hubieran tardado los privados en desarrollarla por su cuenta.
ReplyDeleteSi la luna fuera de oro sólido se habría llegado a ella siglos atrás.
ReplyDeletePara que los privados pongan plata tienen que otorgarles derechos de propiedad sobre lo que se obtenga de beneficios.
ReplyDeleteRothbard, hay mucho, muchísimos privados invirtiendo en exploración espacial, con diversos fines. Lo de hacer minería en la luna tendría sentido en combinación con fábricas en la misma luna, para hacer cosas en baja gravedad que acá no se pueden. Supongo que es impráctico traer raw materials desde la luna a la tierra para procesarlos acá.
ReplyDeleteMe hiciste acordar de cuando trajeron una roca lunar a Bs. As. y la exhibieron en el teatro San Martin, yo era un purrete y me quedé alucinado al verla.
All we hear is Radio Gagarin.
ReplyDeleteROTFL!!!
ReplyDeleteAh, cómo no!! Y se olvidan de todos los puestos de trabajo que se generan.
ReplyDelete(No rabatir que va en joda)
Massa, es muy simple, si los americanos no hubiesen llegado a la Luna, los rusos, que también gastaron un enormidad de recursos, nunca se la habrían dejado pasar.
ReplyDeleteHay oro en la Luna:
http://duckcomicsrevue.blogspot.com/2009/04/loony-lunar-gold-rush.html
Una vez me dijeron que todo suceso tiene que ser imaginado o pensado en su contexto.
ReplyDeleteNo se si empresas privadas se hubieran arriesgado a tal hazaña.
Había muchos contratistas privados, recuerden en la fabricación de los cohetes.
En la historia, la WW2, la Guerra Fría fue precursora de grandes avances y desarrollos en la tecnología.
Prueba de ello es Internet, Unix (como SO), C y C++, las microcomputadoras, la arquitectura de Vonn Neumann, las Bombas, la energía atómica, la aeronáutica.
El conflicto ayudó en mucho y en esa coyuntura, la guerra fría con el cobarde de JFK se hizo historia.
Sino de que estaríamos hablando?
Unix y C no tienen nada que ver con la guerra fría ni con contratistas para proyectos gubernamentales. Fueron desarrollados, básicamente, para servir de plataforma para un sistema de procesamiento de documentos (más concretamente, para realizar "typesetting" de documentos) para la división de patentes AT&T (el desarrollo se realizó internamente en la misma empresa, en los famosos "Bell labs").
ReplyDeleteSheppard no llegó a completar una órbita alrededor de la Tierra, cosa que sí logró John Glenn.
ReplyDeleteUds. son muy jóvenes y no vivieron la carrera espacial en su apogeo y la cantidad de emociones que despertó entre la gente común. Había muchas cuestiones de honor nacional y prestigio involucradas, pero también había un sentimiento de orgullo de estar abandonando las cadenas que nos ataban a la Tierra.
Los primeros astronautas de los dos bandos eran tipos absolutamente excepcionales en lo físico, psíquico y como pilotos. Todos eran militares veteranos de guerra, además de contar con títulos diversos en ingeniería o física.
Me acuerdo que me impresioné muchísimo al escuchar una emisión de la Voz de las Américas donde pasaron una supuesta transmisión de un astronauta ruso desde el espacio pidiendo auxilio porque no podía maniobrar para regresar a la Tierra.
Este tipo transmitía en alemán y en ruso y mi padre que hablaba alemán nos iba contando que el final de mensaje era de despedida hacia su familia y que rogaba al Control de Misión Ruso que le hicieran llegar el mensaje a su esposa. No hizo ningún llamado patriótico, simplemente era el mensaje postrero de un soldado que sabía que iba a morir. Fueron varias las transmisiones de este tipo que se difundieron y los rusos siempre las negaron. Nunca supimos si habían sido auténticas o era propaganda americana, pero el impacto en la gente era muy fuerte.
Me acuerdo que era habitual mirar el cielo de noche para ver pasar los satélites (no eran geoestacionarios) o las naves tripuladas y siempre era un placer encontrar alguna atravesando el cielo.
Fue´algo muy especial y siempre me acuerdo de esos tiempos con muchísimo respeto por esos astronautas.