La argentina es una sociedad venida a menos que pretende venderle al resto del mundo aquello de que lo suyo no es fracaso sino desinterés por el éxito. Es lógico que se refugie en la izquierda delirante:
En realidad, la izquierda desde el Partido Obrero hasta Pino Solanas, la Cámpora o el trotzkismo callejero de Quebracho, pasó de la política al folclorismo nostálgico de la boina derrotada del gran Guevara y del rencor al capitalismo, sin advertir que los dos imperios marxistas-leninistas no fueron derrotados en alguna atroz guerra mundial, sino que implosionaron con sus partidos marxistas-leninistas en el poder, precisamente por haber fracasado en el centro de todo el edificio materialista-dialéctico, cuyo ladrillo fundamental era la economía como sostén de todas las superestructuras.
Las izquierdas ya no pueden hacer la revolución, sino jugar a la revolución. El progresismo es la sustitución de la revolución por modificaciones cosméticas que no cambian el extremo rigor de la estructura capitalista mundial.
El sueño de Marx era el fin del principio de escasez. Si había de todo para todos, viviríamos en un mundo feliz y el estado directamente desaparecería. El estado era siempre un instrumento despótico de una clase en contra de las demás. La dictadura del proletariado se justificaba solamente porque las fuerzas productivas (es decir la productividad de la economía) habían dejado de crecer y entonces nunca llegaríamos a terminar con la escasez. El proletariado debía tomar en poder para garantizar que la historia siguiera en su camino positivo. Claro, 160 años despues, la productividad capitalista no ha dejado de crecer, más aún la tasa de crecimiento tiende a aumentar, mientras que en los paises del socialismo real, la productividad se estancó y por eso sucumbieron implosionando pese a las terribles masacres que realizaron para perpetuerse. El socialismo despues de esto no tiene sentido ni siquiera formulado en la mesa de un bar. Lo que pasa es que los socialistas modernos son tan chantas que no leyeron ni el prólogo del manifiesto comunista.
ReplyDeleteMiguel, a esta gente lo que la entusiasma de todo esto es la legitimación de la envidia y el resentimiento.
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