Y, sin embargo, pareciera que finalmente terminaron de entender que las devaluaciones no son el camino para que una economía se vuelva más competitiva.
En una de esas todavía hay esperanza para Argentina.
Sabés lo que pasa Louis, con gasto creciente, incipiente deficit fiscal primario y emisión monetaria descontrolada, no se trata de ser o no devaluacionista. La devaluación vendrá por las buenas o por las malas tarde o temprano.
Sabés lo que pasa Louis, con gasto creciente, incipiente deficit fiscal primario y emisión monetaria descontrolada, no se trata de ser o no devaluacionista. La devaluación vendrá por las buenas o por las malas tarde o temprano.
ReplyDeleteEs así, Miguel.
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