Tengo mis serias dudas. Pero, por el bien del país, espero que tengan razón ellos.
Pero aún si es cierto, no conozco casos de países que sufren de la “maldición de los recursos naturales” que hayan podido escapar del círculo vicioso de la pobreza y del atraso. La única excepción debe ser Noruega. Miren lo que pasa en Venezuela, Ecuador o las satrapías petroleras de Medio Oriente y África.
A mi cada tanto me gustaria abrir el cajon de la cómoda y encontrarme una sorpresa asi...
ReplyDeleteArgentina vivió una epoca en que estaba entre las primeras 20 economias del mundo, lo de Argentina es un proceso de involucion de su sociedad
ReplyDeleteuna sociedad que durante mucho tiempo quizo vivir de su propio trabajo, el de Venezuela es mas un electrocardiograma, de una sociedad que no pudo avanzar por diferentes
razones y un dia el gobierno descubre el petroleo paga todas las deudas, y aun tiene una cantidad gigantesca de dinero que los dictadores usaron para hacer regalos a la población y tratar de mantenerse en el poder mal acostumbrando a la gente, cuando llega la democracia todo el mundo cree que se puede vivir asi.
Pero si quieres una excepción: Chile
Una cura, como dice Moises Naim, la única forma es democracia y libre mercado.
Anexo el articulo de Naim, sobre la maldición de los recursos:
http://www.moisesnaim.com/content/oil-can-be-curse-poor-nations
"¿Dónde habré dejado los lentes de contacto?"
ReplyDeleteBaidegüey, ¿qué decía el post?
Trataré de ser breve para no aburrirlos, ni aburrirme:
ReplyDelete1.
En los países de Europa del Este durante el siglo XVI se dio un fenómeno que los historiadores denominan “Feudalización del siglo XVI”. Básicamente: Mientras Europa Occidental se deshacía del feudalismo y se encaminaba hacia la edad moderna, ocupándose de actividades manufactureras e industriosas y dejando de lado la agricultura meramente extensiva; Europa del Este –del Elba para allá- se dedicó a seguir con la agricultura extensiva, venderle cereales a muy buen precio a la Europa Occidental, permanecer en el feudalismo, sin avanzar hacia la modernidad en lo técnico ni en lo ideológico. En el momento podía parecer negocio. Pero visto en retrospectiva esto causó el atraso económico, pero sobre todo cultural, político e ideológico, que por siglos llega hasta hoy de toda esa región.
Esta historia se asemeja a la de un país austral de cuyo nombre no quiero acordarme.
2.
El crecimiento de una commodities no puede ser infinito. Sería la excepción excepcional de la regla.
El cruce del análisis técnico financiero con el análisis fundamental (si eso sólo no es a una aberración) no es mi especialidad. Si alguien puede aclarar esto, mejor.
Puestos a especular escenarios:
Desde el punto de vista fundamental: En algún momento la demanda real del producto se puede agotar, puede ser sustituido y demás etcéteras.
Desde el punto de vista del análisis técnico: El gran crecimiento en el precio ya ha tenido una caída y un repunte que marcan, al menos en el mediano plazo, un techo. Puede seguir creciendo, pero insisto: sería “la excepción excepcional”. Nuevos retrocesos, aunque no muy grandes, pueden alterar el equilibrio entre el gasto y el ingreso, complicando el presupuesto fiscal y la economía del país.
Ahora. Sólo para Argentina, teniendo en cuenta todo lo anterior, suponiendo que “esta vez sale bien” y que dura mucho tiempo: La perduración de “el modelo” sería un aparente triunfo momentáneo y un fracaso casi irreversible en el largo plazo. Los historiadores recordarían este momento particular de la historia de ese país lejano como “La sojización del siglo XXI”.
Claudio.