Himno Infantil Argento a los Recursos Naturales.

Señora vaca, señora vaca 

Hoy le doy gracias por todo lo que nos da, 

Hoy mi maestra nos ha enseñado que en su cuerpito

se trabaja sin cesar;

Estribillo: 

Y nos da la leche, 

y el dulce de leche 

y la manteca que siempre le pongo al pan: 

Tambien el queso que es tan sano y un yogur para mi hermano 

Señora vaca, usted sabe trabajar (bis)

Señora vaca, Señora vaca 

Cuando en el campo yo la veo a usted pastar 

Y sus hijitos, le tiro un besito 

Pues me doy cuenta que es una buena mamá

Es una canción infantil. Para chicos de jardín, no más. Casi me animo a decir que está bien en su ámbito, si no fuera porque veo las creencias de los adultos que la escucharon de niños. Tal vez es responsable del estado de situación. No sé. 

¿Habría que prestar atención, como si fueran una cosa seria, a las canciones infantiles? 

El grupo que la cantaba se llamó KatrasK. Sí las dos veces con "K" ¿Era eso una premonición? ¿Tendrá algo que ver?

No me da de hacerle un análisis semiótico profundo. No jodamos. Pero ahí está casi toda la ideología de la que venimos hablando por aquí.

La vaca da la leche. Inútil explicar que: la vaca no da la leche. Hay que sacársela, por la mano, el trabajo del hombre. Ese proceso se llama ordeñe.

No es el cuerpito de la vaca el que trabaja sin cesar, sino toda la cadena de la industria lechera la que lo hace.

La manteca, el dulce de leche, el queso y el yogur no salen de la vaca ya confeccionados y envasados. La vaca no da dulce de leche, ni los otros subproductos. Nuevamente: son sub-productos de la leche confeccionados por el hombre, artesanal o industrialmente.

La idea de el cuerpo de la buena mamá que da es recurrente, así como siniestra, en la historia de la imaginación argenta. La teta del Estado es una de sus variantes más conocidas.

Cuando yo era muy chico y paseábamos por el campo, por la ruta, los mayores solían hacer el chiste de que las vacas negras daban café, las marrones té con leche, las con pintas café con leche, las blancas leche sola, etcétera. Todos reíamos y nadie se lo tomaba en serio.

Hoy parece como si todo un país creyera que de verdad, en serio, en el mundo real de la realidad real -ya no sé cómo decirlo-, las cosas suceden como en esta canción. Gente adulta, que cumple sus responsabilidades, cría hijos seriamente, etcétera, pareciera estar animada por un espíritu infantil, como el de esta canción, en donde la riqueza es dada naturalmente.

Canción original:

Disclaimer:

Ninguna vaca ha sido maltratada en la realización del presente post.

La letra tampoco hace alusión a ningún mandatario actual.