Y bueno, alguna vez la van a pegar con las predicciones de su muerte:
No tiene sentido suponer que Raúl Castro esconderá la muerte de su hermano. ¿Con qué objeto? Él tiene en sus manos todos los resortes del poder. Cuando ocurra, a las pocas horas de ser notificado el general-presidente, las emisoras de radio comenzarán a tocar marchas militares y temas fúnebres, y algún locutor consternado anunciará con voz engolada la hora en que el portavoz del gobierno, o el propio Raúl, se dirigirá a la nación para hacer un anuncio importante. En ese momento, ya todo el mundo supondrá de qué se trata y la noticia, deliberadamente filtrada, será recogida por todas las agencias de prensa internacionales.
¿ Y qué si Fidelito sobrevive a Raulito ? Porque eso también puede suceder...
ReplyDelete¿ Volvería a tomar las riendas el barbeta...?
¿ Tienen a alguno preparado para la posibilidad..?
¡ Qué duda existencial !
En realidad la solución sería una mipieza total lo que haría falta, pero no lo veo probable.
Las deseo a Fidel y a su hermano una larga y saludable vida. Y espero que la revolución dure por siempre.
ReplyDeleteY paso a fundamentar.
Cuando caigan, a los dos meses, a más tardar, el mundo, a través de aquellos que hoy hacen la vista gorda al desastre que es la isla, es decir, los cómplices como los medios de desinformación, van a revolver hasta el último rincón y ese lugar destruído, estancado en el tiempo, será responsabilidad de quienes tengan en sus manos la reconstrucción de Cuba. Al mismo tiempo, se recordarán con nostalgia los cuentos de aquella tierra de prosperidad socialista, de salud gratuita, soberanía y dignidad, y el capitalismo será responsable de no poder satisfacer las necesidades básicas de los cubanos, cuya única preparación es perseguir turistas y dejarse cojer por un jabón.
Es políticamente incorrecto desearle a los cubanos la eternidad comunista, pero eso es lo que buscaron hace 53 años.
Lo mismo para Venezuela y Argentina. No se vuelve muchachos. Ahora a comerla (pardon my french).
¿Seguro que es lo quebuscaron? ¿No habrá sido la necesidad de sacarse al Sargento Batista de encima?
ReplyDeleteEn la situación de Cuba en 1958, hubieran recibido con vítores a cualquiera que los liberase. Si cayeron de la sartén y aterrizaron en las llamas no lo pudieron prever y no fue a los únicos que les pasó eso.
Ahora no se les puede negar una oportunidad de rehacerse sin tutelas.
En cuanto a la "prosperidad socialista, la soberanía y la dignidad" me parece que no hay muchos cubanos que las consideren así. El recuerdo que les quedará a la mayoría es el del racionamiento, la falta de libertad y el pensamiento único.