Nov 19, 2012

¿Se imaginan vivir así?



¿Qué los uruguayos, como represalia por lo de las pasteras, desde Colonia hagan llover decenas de cohetes explosivos por día sobre la Capital Federal?

Ariel Kanievsky | Ashdod (Israel) 2012-11-16:

Imagina que vas caminando por la calle y de repente oyes el sonido de una sirena. Varios misiles Grad están a punto de caer en algún lugar de la ciudad y sólo tienes unos segundos para buscar un refugio antiaéreo donde ponerte a cubierto. Si no lo hay en las proximidades tienes que correr lo más rápido que puedas hacia la planta baja de un bloque de viviendas, hacia una tienda o, incluso, colocarte detrás de una pared que te proteja en caso de que algún misil caiga en las proximidades.

Pasa la sirena y se escuchan las explosiones. Por suerte tú estás bien. Los misiles deben de haber caído en el otro extremo de la ciudad, pero aún es muy pronto para saber el lugar exacto o si habrán causado víctimas. Imagina ahora que tu mujer está en el trabajo, tus hijos en el colegio o en la guardería y tus padres en su casa. Cada uno en un punto distinto de la ciudad. Imagina la angustia al no poder ubicarlos a todos enseguida debido al colapso de las líneas de teléfono y el pánico al no saber si están a salvo. Pasan los minutos y por fin consigues hablar con ellos. Los niños están llorando y tu mujer tiembla de miedo, pero por suerte todos tus seres queridos están bien.

Al llegar a casa te enteras de que uno de los misiles alcanzó el edificio de enfrente, causando enormes daños materiales y dejando a varios vecinos en estado de shock. Esta vez, gracias a Dios, no hay que lamentar heridos de gravedad. Imagina que de repente, cuando crees que ha pasado lo peor, vuelves a escuchar la misma sirena. En esta ocasión te encuentras al lado de tu familia, pero como vives en el último piso del edificio, y estás demasiado expuesto, corres con tus hijos por las escaleras y bajas un par de pisos, tal y como indican las instrucciones del Comando de Defensa Civil. De nuevo todos están bien. La sirena pasa y se oyen las explosiones a lo lejos. Regresas a tu casa y en las noticias ves que uno de esos misiles que escuchaste a lo lejos aterrizó en el colegio de tu hija, destrozando parte de sus aulas y provocando enormes desperfectos. Imagina la impotencia, el pavor y la conmoción que sentirías al pensar que el misil podría haber caído en horario escolar.

Vuelves a dar gracias a Dios.

Imagina que quince minutos después vuelve a sonar la sirena. Y nuevamente al día siguiente. Y al siguiente. Y al siguiente. ¿Te lo has imaginado? Acabas de imaginarte la vida en las ciudades de Ashkelon, Sderot, Ashdod o Beersheva. Acabas de imaginarte la vida de un millón y medio de civiles israelíes.


(Gracias, Pérez)

6 comments:

  1. Hay que insistir que estos ataques son permanente. En especial hay que insistir para que la hipocresía de la progresía internacional se entere que cuando Israel responde es por que ya hubo cientos de ataques de misiles palestinos, previos, comprados con el dinero de la ayuda humanitaria al pueblo palestino que envía Europa. Además, el árabe ni se respeta ni se reconoce como individuo ni como persona, sino como un siervo totalmente sometido por el fanatismo religioso, sumiso; esto muy fogoneado por los sus líderes para su aprovechamiento en la guerra. Por eso usan tanto a los niños en el frente de cualquier combate, por el impacto que produce en la opinión pública y por lo "barato" que sale como arma de lucha- JUAN

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  2. En la década del 60, durante la guerra de los seis días, los países árabes eran fundamentalistas, pero no islámicos ni religiosos, sino filosoviéticos: Egipto estaba al mando de Gamal Abdel Nasser, un "nacionalista de liberación" alentado por la Unión Soviética; Irak y Siria estaban gobernadas por el Partido Socialista Baath, no confesional. En aquella época, Nasser expulsó a la Fuerza de Emergencia de las Naciones Unidas (de la Península del Sinaí en mayo de 1967.
    La masacre de los juegos olímpicos de Munich (1972) contra los miembros del Equipo Olímpico Israelí fue perpetrada por el grupo palestino Septiembre Negro, con fluidos vínculos con la Facción del Ejército Rojo, “Baader Meinhoff”, que a la vez recibía apoyo de los servicios secretos de Alemania Oriental (comunista).
    Durante mucho tiempo, no se discutía que los ataques contra Israel no provenían del fundamentalismo islámico, sino de grupos terroristas y países árabes financiados por la Unión Soviética y sus países satélites.
    Lo que estoy diciendo no es una novedad: basta consultar los documentos de las décadas del 60 y el 70.

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    1. Julio, bien al principio, Israel contaba con el apoyo de la izquierda.

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    2. Bueno, al principal y sorpresivo apoyo e impulsor de la creación del estado de Israel en la asamblea de la ONU fue Gromiko, y uno de los enemigos más encarnizados del estado judío Inglaterra.
      Cambiaron muchas cosas, lo que no cambia es la propaganda pro islámica cada vez más fuerte proveniente de los suicidas destructores progrechorros de eurabia.

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    3. El problema de los progres es que son todos sodomitas.
      Eso los impulsa a aplaudir al sometedor de turno.

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  3. Julio, tengo exactamente el mismo criterio que Ud. porque así fueron los hechos históricos fácilmente comprobables en los numerosos libros, revistas y diarios de los años 50', 60' 70'. El Gran Muftí de Jerusalen era un nacionalista árabe pronazi que empezó con el terrorismo contra los kibbutz incluso bajo la administración británica antes de 1948 y contaron con el apoyo de numerosos militares ingleses proárabes y decididamente antijudíos.

    Todos los grupos como Al Fatah, la OLP, el Frente Popular para la Liberación de Palestina el MPOLP y demás grupúsculos que terminaron confluyendo en Septiembre Negro eran decididamente marxistas, ateos y laicos adoctrinados sus jefes en la Universidad Patrick Lumumba en Moscú. No invocaban a Allah ni por asomo.

    Los únicos islámicos que recuerdo eran los Hermanos Musulmanes de Egipto que asesinaron al Presidente Egipcio Anwar el Sadat por hacer la paz con Israel luego de la guerra del Yom Kippur en 1973.

    Con la llegada al poder del Ayatollah Komeini es que se inicia la organización de grupos terroristas más o menos fundamentalistas islámicos como los que conocemos actaulmente.

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