No hay Caso, Están en Todos Lados

En nuestro caso, nos fuimos de Argentina en gran medida escapando a este tipo de actitud ante la vida. Hace unos días fue el mail de la rejunta de firmas para meter en cana a Bussi. Mi primer punto es si es una buena idea usar la lista de distribución de los argentinos de la zona para este tipo de cosas. Me pregunto si la persona que lo mandó y las que firmaban pondrían su nombre en un petitorio para que renuncie el Gran Fidel y sea juzgado por violaciones masivas a los Derechos Humanos en Cuba, o si lo hubieran hecho en su momento por Saddam, pero ese es otro tema.

Hoy recibo este otro mail. Lo transcribo en su totalidad porque sencillamente no tiene desperdicio:

Hace unos días fui a hacer compras al nuevo Maxi y conocí unas maquinitas nuevas, muy bonitas eyyyyas, que permiten al cliente, pagar su compra haciendo el trámite directamente con la máquina. Es decir, nos evitamos el contacto con la empleada y seguramente hacer una molesta cola. Genial !! ...

... no tanto si pensamos cual es el fin de estas máquinas: permitirle al empleador minimizar su personal.

OK. Ya sabemos que el motor del ser humano, a lo largo de la historia, ha sido mejorar su situación económica. Es lógico y normal. Pero, no les parece que a estas alturas de nuestro desarrollo, como humanidad, con tantos hermanos y hermanas que se mueren de hambre EN ESTE MOMENTO deberíamos reveer que es lógico, qué es normal ?.

Al que quiera empezar a reunirse para ver cómo podemos poner nuestro granito de arena y demostrarle, y demostrarnos, a nuestro prójimo que no somos sólo inmigrantes que perseguimos nuestro bienestar económico, escríbanme o llámenme y podríamos empezar algún proyecto juntos.

Por el momento, y dejando el verso de lado, los invito a la siguiente reflexión: para mí, el principal problema que tiene la raza humana actualmente es la falta de trabajo.

Es largo para escribirlo (algún día lo podremos hablar) pero a partir de allí, en cadena, se generan los demás problemas que nos afectan: miseria, delincuencia, violencia, represión, falta de libertad, corrupción, injusticia ... más falta de trabajo, etc.

Quizás fue una introducción un poco larga para proponerles cual puede ser nuestro primer granito de arena como argentinos del Estrie: NO UTILIZAR LAS MáQUINAS DEL MAXI y cuando tengamos la oportunidad, y las ganas, difundir esta idea a los quebecos explicándoles los motivos.

Primero pensé en contestarle al autor por mail, tal vez tratar de explicarle, pero para qué. ¿Qué argumento racional se puede posiblemente usar ante esta sarta de lugares comunes sin sentido? Me hace acordar al Excelentísimo Bañero de la Nación Duhalde, cuando como gobernador de la provincia de BA combatía el desempleo haciendo pavimentar calles a mano, en lugar de usar maquinaria vial.

Mi propuesta sería no quedarnos en no usar estas maquinitas. Clausuremos los hipermercados y supermercados y volvamos al viejo almacén de barrio. Es más, como proponían los “luditas” en plena revolución industrial, terminemos con las máquinas. Ya que estamos hablando del nuevo Maxi, hagamos mierda las máquinas que reciben las botellas, reemplacémoslas por empleados sentados en un mostrador, por lo menos uno por tipo de envase, ojo. Ya que estamos, mejor dos por tipo de envase, uno lo recibe y el otro achata la latita con el pie y la mete en una bolsa. Además, para combatir el estrés, hagamos turnos de trabajo de 6 horas. No vaya a ser que este pobre tipo sufra una hernia de talón por tanta lata achatada.

Pero, ¿por qué quedarnos en eso? Llevemos adelante nuestra revolución y tiremos abajo los puentes sobre el St Francois y Magog, así volvemos a los balseros que hacían cruzar a la gente de una orilla a otra, creando cientos de puestos de trabajo. Imagínense si prohibimos los autos, volvamos todos a los caballos, miles de puestos de trabajo con establos, cultivos de alfalfa, abrevaderos, herreros, limpiadores de bosta y demás actividades de altísima productividad.

Señores, somos argentinos, tenemos una larguísima tradición y experiencia en la materia. Deberíamos ser expertos en el tema. Cuanto antes lo entendamos, mejor. Trabajo genuino es la producción de un bien o un servicio por el que hay demanda genuina. Todo lo demás es puro verso, subsidio encubierto que tarde o temprano se paga.

En fin, nos tratamos de escapar pero esta gente está en todos lados. Como David Vincent en Los Invasores, estamos rodeados. La macana es que a estos pelotudos no los podemos diferenciar por el dedo meñique duro.