Incentivos

Insisto, en Argentina seguimos reciclando ideas medievales en política económica que fracasaron toda vez que se pusieron en práctica en el país y en el mundo. Tal vez uno de los casos más significativos sea el del sector petrolero.

Por la mayor parte de su historia, la Argentina fue un importador neto de petróleo. El país se convirtió en exportador neto en 1992, a partir de la desregulación del sector y de la aplicación de políticas de mercado, con la privatización de YPF y liberación del precio de los combustibles.

Todo este proceso fue literalmente arrojado a la basura a partir de 2002, con la vuelta del modelo de sustitución de importaciones. El cambio de reglas del sector y la imposición de retenciones a las exportaciones, significó un cambio de incentivos perverso. El resultado es que si todo sigue igual, en muy pocos años volveremos a ser importadores de crudo. Eso si, con dignidad.

Insisto, volvemos a aplicar las mismas políticas de siempre y tenemos exactamente los mismos resultados. Somos un ejemplo de libro de texto.