Discursos para la Tribuna

Seguimos manejando la política exterior como si se tratara de un apéndice menor de lo partidario y electoral, 100% para consumo interno.

Siguen las agresiones y ataques gratuitos a Uruguay por el tema de las plantas de celulosa. Estoy convencido de que siguiendo la larga tradición argentina, lo último que les interesa a los muchachos de la cancillería es solucionar el tema. Pertenecemos a una sociedad en la que la confrontación goza de mucho más prestigio que la negociación.

Es muy común el abuso de la frase “país hermano”, pero creo en el caso de la Banda Oriental es el único en que es 100% acertada. Nos dimos maña para crear un conflicto total y absolutamente inútil y gratuito con Uruguay, me pregunto si queda alguien más.

Cada día más solos y cada día más atrás en el pelotón. Me gustaría saber cómo se vuelve de todo esto. El gobierno que se haga cargo del país cuando vuelva un grado mínimo de racionalidad va a tener que hacer milagros para desandar tanto disparate.