Apr 20, 2006
"Toledo resultó ser más blanco que cualquiera de nosotros"
Interesante entrevista a Hernando de Soto, el economista peruano. Insisto, entiendo que la esperanza es lo último que se pierde. Es comprensible que intentemos aferrarnos a cualquier cosa para seguir pensando que todavía tenemos la oportunidad de cambiar. Pero ceo que nos autoengañamos si tratamos de disimular la más que evidente vuelta a las peores épocas del pasado nacional - populista de la región.
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Mirá esta gente, que simpática.
ReplyDeleteLuis, que el gobierno de Toledo haya tenido buenos resultados económicos es verdad. Pero también sucede que se ha mandado macanas en otros aspectos, lo cual explica su baja tasa de popularidad.
ReplyDeleteEso sí: no sé si conocés la página de la Agencia Interamericana de Prensa Económica, pero verás que si ponés en el buscador "Alejandro Toledo" en muchos artículos el actual presidente peruano no sale bien parado. Y me acuerdo que en uno de ellos mencionaba que Toledo era un "regalador" o, dicho en criollo, un prometedor de muchas cosas para cumplir con muy pocas.
Creo que todo es relativo en la vida. En circunstancias normales, Toledo sería un desastre, pero dado el contexto en el que se mueve (el resto de la región), no sale tan mal parado. En la Argentina hay mucha gente que defendía al ex ministro Lasaña, diciendo que era la voz de la cordura dentro del gobierno de Kirchner. Esto no habla bien de Lasaña, sino de lo mal que estamos como sociedad.
ReplyDeleteLuis, a mí tampoco me gustaba Lasagna, porque él más bien no hizo ningún intento por encarar reformas de fondo, más bien intentó hacer lo contrario a lo que se debe hacer.
ReplyDeletePero al lado de Kirchner, Lasagna parecía la voz de la cordura de un gobierno loco y desastroso. Tal era la cosa que Roberto Cachanosky decía esto el día que Lasagna se fue:
"El desplazamiento de Roberto Lavagna del Ministerio de Economía y su reemplazo por Felisa Miceli, hasta ahora titular del Banco Nación, implica la caída del último dique de contención frente a los desvaríos del Ejecutivo en materia de política económica."
"Lavagna, con todos sus errores en política económica, al menos era un pequeño dique de contención ante los desvaríos a los que cotidianamente es sometido el país. Era un frágil límite al desborde mayúsculo."