"A Israel le exigen conductas éticas"

Entrevista a Pilar Rahola en Ámbito Financiero de hoy. Aparentemente el autor de la nota está convencido de que la judeofóbia es una cuestión de la progresía solamente:

Pilar Rahola parece una contradicción en sí misma: esta ex diputada y ex vicealcaldesa de Barcelona por la izquierda catalana viaja por el mundo y escribe parvas de artículos sosteniendo sobre Israel una posición opuesta al resto del «progresismo» mundial. De nuevo en Buenos Aires (hoy hablará en el Club Hacoaj), Rahola es una ametralladora de definiciones polémicas, que involucran no sólo al islam fundamentalista sino a Hugo Chávez, al presidente español José Luis Rodríguez Zapatero y a lo que califica de «periodismo de hamburguesa» (ignorante pero veloz). Veamos los pasajes más salientes de su diálogo con Ámbito Financiero:

• ¿Quién ganó la guerra? Israel ganó y perdió. En lo militar no resolvió el tema Hizbollah, y el Líbano se convirtió en efecto en un pantano. Pero Hizbollah también sufrió reveses militares y graves pérdidas. Para Israel fue una guerra más dura de lo que esperaba, y hubo civiles muertos de ambos lados.

• Políticamente, Israel perdió; es una sociedad democrática en la que esta guerra agudizará la crisis, sobre todo porque no se alcanzaron los objetivos planteados al inicio. El de Ehud Olmert es un gobierno que nació débil y esto lo debilitará más.

• Del otro lado, Hassan Nasrallah -líder de Hizbollah- consiguió un éxito importante; se consolidó como interlocutor en el conflicto de Medio Oriente -lo que definitivamente no es bueno de cara a conseguir la paz-, es hoy más popular y se rodeó de una aureola casi mítica.

• A Israel se le exigen comportamientos más éticos en este escenario porque es una democracia, claro... ¿A quién se le ocurre exigirle a Hizbollah que no bombardee civiles? Israel, y esto es muy bueno, padece de autoexigencia moral, pero también es cierto que está bajo un microscopio que no se pone sobre otras democracias. ¿Qué pasaría si ese microscopio se posara sobre España, Francia, Alemania? Revelaría unas verrugas y unas miserias enormes, pero hoy sólo miramos las israelíes. Estoy segura de que el Poder Judicial de Israel es más independiente que el de España o la Argentina. Ambos sufrieron atentados que arrojaron cientos de víctimas y seguimos hablando más de responsabilidades políticas que de los asesinos.

• Esa exigencia a Israel es hipócrita: el mundo decidió que Israel debe ser la democracia perfecta, aún cuando está en guerra por su supervivencia desde hace 58 años. Me pregunto cuántas democracias serían éticas en iguales circunstancias...

• Rodríguez Zapatero es un político muy fino en lo interno, más que Aznar, pero en relaciones exteriores es muy mediocre. Se ha mandado enormes meteduras de pata, como por caso hacerse fotografiar con la «kefiyah» (pañuelo distintivo de los palestinos) en medio de una guerra en la que se supone somos neutrales. Además, puso como canciller a Miguel Angel Moratinos, más conocido como «Desatinos», que había sido ya un papelón como negociador en el conflicto del Cercano Oriente.

• Hugo Chávez es un payaso con petróleo; no es un estadista, es un problema. Creo que la Argentina está yéndose a dormir con el diablo en su cercanía con él. Pero no tiene ninguna influencia posible en la situación en el Cercano Oriente.

• Israel sufre varias distorsiones mundiales. La primera es que desde la Guerra Fría el mundo -por el «periodismo hamburguesa»- la considera el brazo armado del imperialismo en la región. Además la izquierda se quedó sin épicas ni utopías; qué mejor entonces que alguien se suba a un caballo y desde la montaña grite: «¡Muerte al imperialismo!» fusil en mano. Lo curioso es que en España, esa izquierda que no le da la mano a un cura por lo que representa, se abraza a un imán integrista que sojuzga a las mujeres y manda poner bombas en restoranes.

• Otra distorsión es la extraordinaria capacidad de propaganda del mundo árabe: tienen un gran dominio de la ignorancia mundial y también del poder de la imagen. Nasrallah y Osama bin Laden son Goebbels con Internet. Eso lo manejan a la perfección.

• Además, contra Israel se vive mejor. Un caso claro es Kofi Annan, otro es la izquierda, pero hay muchos más. De un lado tienes a las tiranías petroleras sentadas sobre una montaña de oro, y del otro a los judíos, que nunca te buscarán para matarte si los criticas, todo lo contrario de lo que pasa con los fundamentalistas islámicos.

• Respecto del integrismo, estamos como en la Alemania de los 30. No se trata de una guerra de civilizaciones o religiones, seamos claros, pero cabe preguntarse cuántos han sido seducidos por el extremismo religioso. Un somero cálculo diría que 30% de los musulmanes se alegraron de los 200 muertos de los atentados en Madrid. Son 400 millones de personas. Si de ésos, 10% «hace algo», tenemos 40 millones; si de ellos, 10% asume una posición militante, son 4 millones. Y si de ellos apenas 10% se convierte en terroristas, estamos hablando de 400.000 potenciales asesinos. Es un número escalofriante...

Entrevista de Sergio Dattilo