Nov 24, 2006

Singapur


Johan Norberg sobre la paradoja de Singapur. Muy interesante, si continua creciendo a las mismas tasas, en 2011 este país de Asia tendrá un PBI per cápita más alto que Suecia.

Muy relacionado con lo que hablamos por acá alguna vez con Jorge (ex anónimo) en relación a China. ¿Es posible, y deseable, el desarrollo sin democracia?:

I am in Singapore for the first time. A wealthy country that is a paradox. The world’s most globalised economy; the country where it is easiest to do business, with an economy that is less corrupt than Sweden’s and Switzerland’s. And yet, it’s an undemocratic country with government control of the courts and the media, where opposition figures are bankrupted by absurd legal processes. That paradox in itself makes it worth studying.

With unilateral free trade and liberal rules, Singapore has succeeded in becoming a meeting place, a regional hub for global businesses. But as other countries liberalize their economy and attract the same companies, can Singapore really encourage local entrepreneurship and innovation, while at the same time discouraging people from thinking for themselves and acting in strange, unpredictable ways that are not welcomed by the establishment?

The jury is still out.

2 comments:

  1. No tiene nada que ver pero se que va bien con tu blog esto.
    Miren todos como en una democracia total el presidente acepta cuestionamientos y preguntas incisivas de un periodista mientras que en nuestro "país" tenemos a un presidente mucho menos cuestionado que dubya y no dio ni una sola conferencia de prensa.

    http://www.youtube.com/watch?v=b8ZuQndRLTU

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  2. Klovs, Uno de los aspectos más llamativos de este presidente es que nunca haya dado una conferencia de prensa y que nunca se haya ni siquiera sometido a preguntas libres de periodistas, ni siquiera de los comprados. Aparentemente el tipo sólo se banca entrevistas pagas a solas, armadas con preguntas conocidas de antemano. Tal vez lo más sorprendente sea que a todo el mundo le parezca lo más normal del mundo, nadie lo cuestiona. Tenemos un presidente de la nación que no da la cara por absolutamente nada de nada, no da la menor explicación y estamos chochos de la vida. Nos parece normal.

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