Yo lo dije varias veces por acá y Rubén viene siguiendo el tema como pocos y lo adelantó hace rato. A pesar de los centenares de miles de tontitos en todo el mundo que se alegraban y festejaban la llegaba al poder en Bolivia de un personaje de cuarta como Morales. La locura y el aventurismo nunca son gratis, por más que en algunos casos sea posible patear para adelante las consecuencias.
Evo Lucionado Morales sostuvo en su momento que se iba a convertir en una “pesadilla para los EEUU”. Yo aclaré que efectivamente se iba a convertir en una pesadilla, pero lamentablemente para los mismos bolivianos. Es un horror, pero creo que no me equivoqué por mucho.
Aunque mucha gente no lo crea, la situación de Bolivia es explosiva. Y es totalmente cierto que Evito Inmorales, en vez de convertirse en pesadilla de EE.UU., se transformó en pesadilla para su propio país.
ReplyDeleteLo que sí me alegra es el espíritu de lucha de la mayoría de la población de Santa Cruz de la Sierra a favor de la autonomía y en contra del proyecto comunista de Evito. En la "Media Luna" Boliviana está claro que no aceptan el unitarismo. Y no me parece mala idea que se intente el camino de la independencia.
De acuerdo a mi punto de vista, si bien no excluyo eventuales razones culturales, esta movida del Oriente boliviano tiene razones fundamentalmente económicas: ellos generan casi toda la riqueza de Bolivia y no están dispuestos a mantener a la población del Occidente andino y pobre que quiere vivir a costa de ellos (los del Oriente). La misma rivalidad por causas económicas que vemos en Bolivia la podríamos ver entre los serranos (Quito) y costeños (Guayaquil) y entre el norte y sur de Italia.
Ya que hablamos de la resistencia cruceña al unitarismo, ¿Para cuándo las marchas a favor del federalismo en las provincias argentinas?
Andrés, Creo que la gente de estas regiones de Bolivia se cansó de ser el pato de la boda de las locuras de Morales y ahora se trata de una cuestión de supervivencia. Me temo que en la Argentina falta mucho todavía. A la mayoría de los gobernadores los compras con un par de millones extras de coparticipación federal.
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